El 2018 cerró con buenas cifras macroeconómicas, en especial con las reservas internacionales brutas que sumaron “5.084.3 millones de dólares”, al 31 de diciembre.
Este monto cubre “4.9 meses de importaciones”, es decir que en caso de una crisis internacional o nacional el país puede mantener por casos cinco meses el actual ritmo de importaciones.
Las reservas netas llegaron a 4.791.4 millones de dólares, que mantuvieron su crecimiento apoyado por el mayor ingreso de remesas familiares que al 20 de diciembre sumaban “4.754.5 millones de dólares”.
El mayor ingresos de divisas, monedas extranjeras, permitió mantener la Tasa de Política Monetaria (TPM) en 5,50%, un factor que toma el sistema financiero para ofrecer su tasa de interés sobre créditos y ahorros.
La mala noticia macroeconómica fue el aumento de precios con una inflación de 4,03% (máximo de 5% anual) acumulado al mes de noviembre, que tendría un leve aumento porque la inflación de diciembre fue estable.
La devaluación de 3,2% (75 centavos) con 24.33 lempiras la compra de un dólar y 22.50 la venta, fue la otra mala noticia ya que depreció los salarios y presionó la inflación.
También fue mayor a la proyección del Fondo Monetario Internacional (FMI), pero quedó dentro del margen proyectado por el BCH.