Los recursos serían destinados a sectores afectados por el Covid-19
Aunque la liquidez del sistema financiero ha crecido este año, casi 30.000 millones de lempiras, según datos del Banco Central de Honduras (BCH) por medidas de política monetaria frente al Covid-19, la banca privada pide la “liberalización” de recursos provenientes del encaje legal.
En tres meses, el BCH, además de otras medidas, ha bajado cinco puntos del encaje legal, por concepto de inversiones obligatorias (6.500 millones de lempiras). Pero la medida no es suficiente para reactivar la economía en la actual situación de pandemia.
Ahora el Gobierno, mediante PCM-030-2020, autorizó una nueva reducción del encaje al BCH, tanto en lempiras como en moneda extranjera.
Actualmente el encaje legal es de 12% (12 lempiras de cada 100 ahorrado en un banco o financiera) y 24% en moneda extranjera. El BCH decidirá el porcentaje que se bajará y ese monto deberá destinarse a nuevos créditos o refinanciamientos en actividades productivas afectadas por el Covid-19.
PCM-030-2020, 037-2020 y 041-2020
El decreto PCM-030-2020 en su artículo 24, reformado dos veces y la última vez el 8 de mayo (PCM_041-2020), señala: “De conformidad con las resoluciones tomadas por el Directorio del Banco Central de Honduras (BCH), respecto de la reducción del encaje legal en moneda nacional y extranjera, se le instruye
para que estructure un mecanismo eficiente y en tiempo real de asignación de los recursos provenientes del encaje legal a las instituciones del sistema bancario y financiero nacional”.
Este mecanismos debe vincular “directamente al solicitante de nuevos créditos o refinanciamiento de créditos existentes, de tal forma que la asignación de los recursos liberados del encaje legal sean destinados
a los sectores priorizados en el presente Decreto Ejecutivo”.
Estos son: “la producción agropecuaria; asimismo, que beneficien a los sectores de turismo y alojamiento, industria manufacturera, agrícola y no agrícola, industria y servicios de la construcción, comercio al por mayor y menor, transporte, logística, salud, servicios administrativos, actividades profesionales y cualquier otra actividad y agente económico que sea
afectado por los efectos de la pandemia provocada por el COVID-19″.
El BCH “asignará” este dinero a la institución del sistema regulado que acredite haber recibido, analizado y aprobado la solicitud de refinanciamiento de un crédito existente o de un nuevo crédito.
Esta asignación de recursos se hará a una tasa de interés no mayor al cuatro por ciento (4%) anual por encima del costo efectivo del dinero acreditado por la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS).
El Gobierno también responderá como garantía de estos créditos a través del Fondo de Garantías creada en abril pasado.
¿Qué es el encaje legal?
Los bancos están obligados a guardar una parte de los recursos que reciben de los depositantes para que sirva como una especie de reserva o contingencia ante cualquier eventualidad que afecte al sistema en términos financieros.
En el caso de Honduras esto representa un 12% (12 lempiras de cada 100 depositado) y 24% (12% directo y 12% como inversión obligatoria) en moneda extranjera.
Por este 12% de encaje, los bancos no reciben ningún interés y los bancos centrales los utilizan como seguridad de los ahorros primero y como una forma de inyectar más dinero al mercado en momentos de crisis económica y financiera.
La regulación financiera internacional establece límites en el uso de esos fondos y por ello se debe contar con el respaldo del ente regulado, la CNBS.