Para el sector privado la crisis financiera de la estatal de energía no sólo afecta a la población y al sector industrial sino que puede evitar la firma de un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Un acuerdo daría credibilidad a la política macrofinanciera del gobierno y por ende acceso a préstamos en condiciones “blandas” impulsando una baja en las tasas de interés.
Sin embargo, Fernando García, presidente de la Asociación Nacional de Industriales de Honduras (Andi), estima que el tema de la ENEE “es crítico para toda la sociedad hondureña, para el Estado de Honduras y obviamente va a ser un componente importante en esa firma o ratificación del Acuerdo con el Fondo Monetario”.
De hecho, agregó, ha sido el tema más importante en las últimas discusiones que se han tenido, y lo que se espera es que se pueda resolver de manera positiva.
El déficit acumulado supera los 57.000 millones de lempiras y cada año se cierra con 7.000 millones adicionales y nuevos gastos con proveedores.
“Me parece que es el tema más importante con el Fondo, por el volumen de recursos que está esto consumiendo y sobre todo por las preocupaciones que genera a largo plazo”, señaló.
Recordó que la ENEE es pública “y si no hay recursos para que funcione bien pues va a tener que cubrir eso el Estado y el Estado al final somos todos nosotros”.
Para el presidente de los industriales, el gobierno debe empezar por evaluar los resultados de eficiencia y reducción de pérdidas que compete al proveedor EEH (Empresa Energía Honduras), y después seguir con reducción de costos y reducir el déficit financiero.
Para el Presidente del Colegio Hondureño de Economistas (CHE), Julio Raudales, además de la energía el gobierno debe reducir el gasto, la carga tributaria y el endeudamiento externo.
“El acuerdo dependerá de qué es lo que quieren negociar ellos (FMI), porque la situación del país es compleja. Hay presiones en el tema del gasto, de la deuda y sobre todo el problema energético del país”, apuntó.