El BCE mantiene las tasas y ve riesgos más equilibrados en la eurozona

Las tasas del BCE influyen en la banca europea

El Banco Central Europeo mantuvo sin cambios los costos de endeudamiento en una segunda reunión, al considerar que la presión inflacionista está contenida y que los peligros económicos están disminuyendo a pesar de la subida de los aranceles estadounidenses.

El tipo de depósito se mantuvo el jueves en el 2%, tal y como preveían todos los analistas de una encuesta de Bloomberg. Los responsables políticos no ofrecieron ninguna orientación sobre futuros pasos, y siguieron insistiendo en que actuarán reunión por reunión en función de los datos que vayan llegando.

“Los indicadores de la inflación subyacente siguen siendo coherentes con nuestro objetivo del 2% a medio plazo”, declaró la presidenta Christine Lagarde a los periodistas en Fráncfort, al tiempo que subrayó que las perspectivas de los precios siguen siendo “más inciertas de lo habitual” debido al volátil entorno comercial.

“Los riesgos para el crecimiento económico se han vuelto más equilibrados”, afirmó. “Aunque los recientes acuerdos comerciales han reducido la incertidumbre, un nuevo empeoramiento de las relaciones comerciales podría frenar aún más las exportaciones y arrastrar la inversión y el consumo”.

La mayoría de los funcionarios consideran que las tasas de interés son adecuadas para hacer frente a las consecuencias de los gravámenes comerciales de Donald Trump, las tensiones geopolíticas y -más recientemente- las renovadas turbulencias políticas en Francia que han sacudido los mercados.

La expansión económica en la zona del euro, formada por 20 países, se ha mantenido, mientras que la inflación -un poco por encima del objetivo del 2%- está bajo control.

Las proyecciones trimestrales actualizadas mostraron que los precios al consumo subirán un 1,7% el próximo año, más cerca del objetivo que la anterior previsión del 1,6%. Pero en 2027 aumentarán un 1,9%, menos de lo previsto anteriormente. El Producto Interno Bruto avanzará un 1,2% este año y un 1% en 2026.

El BCE bajó las tasas ocho veces en el espacio de un año antes de quedarse quieto en julio. Esto los redujo desde un máximo del 4% hasta un nivel que no se considera ni restrictivo ni de apoyo a la economía. Los analistas y los inversores ya no ven más recortes este año.

El euro cayó tras la decisión, y los operadores se centraron en las previsiones que apuntan a una inflación más lenta en 2027. La divisa compartida cayó un 0,3% hasta $1,1664. Los rendimientos de los bonos alemanes a 10 años revirtieron las pequeñas ganancias anteriores, cotizando a la baja un punto básico hasta el 2,64%.

Artículo anteriorLos entornos alimentarios están perjudicando a los niños: Unicef
Artículo siguienteLa inflación al consumidor en EEUU sube a 2,9% en agosto