A nivel global, el crecimiento sería de casi un punto porcentual menos que lo estimado en enero
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) presentó este miércoles sus nuevas estimaciones sobre la economía global para 2022, actualizando los pronósticos de enero y señalando que la frágil recuperación de la economía mundial tras la pandemia, junto a los efectos de la guerra en Ucrania, han desatado “riesgos a la baja”.
La ONU proyecta que la economía global crecerá 3,1% en 2022, reduciendo su pronóstico desde el 4% presentado en enero de este año. Estas perspectivas de crecimiento “se ven empeoradas concretamente en los países en desarrollo que importan materias primas, acentuadas, a su vez, por un aumento en los precios para la energía y los alimentos”, advierte el organismo.
En cuanto a América Latina, el organismo hizo un breve ajuste sobre el crecimiento del PIB este año, pasando de 2,2% en enero a 2,1% en la nueva revisión; y proyectando a la vez un crecimiento de 2,8% para 2023.
Para la región, la ONU señala que el panorama sigue siendo “desafiante”, pues la guerra en Ucrania, las crecientes presiones inflacionarias y el menguante apoyo de la política macroeconómica representan “importantes vientos en contra para la recuperación”.
Además, señala que la desaceleración de crecimiento de Estados Unidos y China, socios clave de LatAm, junto con el aumento de los costos de endeudamiento, podrían limitar aún más las perspectivas de crecimiento.
La inflación seguirá al alza
Los pronósticos del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU (DESA, por sus siglas en inglés), señalaron que la inflación global alcanzaría el 6,7% este año, duplicando ampliamente el índice de 2,9% registrado en el periodo de 2010 a 2020.
El informe precisa que la alta inflación representa un desafío puntual para la atención de hogares con bajos ingresos económicos y, además, agudizará “inevitablemente” la pobreza y la desigualdad en “muy poco tiempo”.
Para América Latina la proyección de inflación de la región llegaría a 14,6% en 2022, aún cuando los bancos centrales ya están respondiendo a esta coyuntura aumentando sus tasas de interés.
“La guerra en Ucrania está afectando a la región principalmente a través del aumento de los precios de las materias primas y el aumento de las presiones inflacionarias”, señaló el DESA, previendo que la guerra tenga un impacto negativo en la producción agrícola de Argentina, Brasil y Uruguay, lo que agregará más presiones a los precios mundiales de los alimentos.
Estas proyecciones de PIB entregadas por la ONU están en línea con otros informes recientes de organismos internacionales. El Fondo Monetario Internacional (FMI) señaló en las últimas semanas que el PIB de LatAm crecería un 2,5% en 2022, mientras que el Banco Mundial (BM) estima un 2,3% este año.