Las remesas que recibieron los países de Latinoamérica y el Caribe durante el primer semestre del 2022 alcanzaron 68,002 millones de dólares, informó el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
En el primer trimestre crecieron en $31.678 millones, un 14% mayor a las del mismo periodo del año anterior, mientras que en el segundo trimestre se registraron $36,325 millones, 17% mayor a las del mismo trimestre del año anterior, y que representó el valor más alto registrado en un trimestre hasta ahora.
Las remesas que recibieron los países centroamericanos alcanzaron durante el primer trimestre un monto de $8,595 millones y durante el segundo trimestre marcaron un nuevo máximo histórico trimestral con un monto recibido de $10,027 millones, cifra 17,9% mayor a la observada en el mismo trimestre del año pasado.
Las remesas que recibió Nicaragua durante el segundo trimestre fueron las que crecieron más, 38,7%, gracias al fuerte crecimiento interanual de 42,1% que se observó en mayo de 2022, seguidas por las de Guatemala, 24,6% cuyas remesas en mayo crecieron 42,2% respecto al mismo periodo del año anterior.
“El fuerte crecimiento observado en toda la región centroamericana durante el primer semestre se debe a la fortaleza que se observó en el mercado laboral de Estados unidos y por la estacionalidad típica que se observa en los datos de mayo, que también propició el crecimiento de las remesas recibidas por Honduras (18%), Costa Rica (4,4%) y El Salvador (1,5%)”, destacan los analistas del BID.
En el pronóstico para el cierre de año, se espera que la subregión centroamericana mantenga el ritmo de crecimiento de los influjos de remesas que recibe, con lo que podría acumular una tasa de crecimiento anual de entre 17% y 18%.
México, Suramérica y el caribe
Las remesas que recibió México en el segundo trimestre del año alcanzaron un nuevo máximo histórico trimestral, con un monto recibido de $15,043 millones, cifra superior en 20,1% a la del trimestre anterior y es 15.4% mayor la observada en el mismo trimestre del año pasado.
En el pronóstico para el cierre del año, se espera que México reciba un monto similar de remesas, con lo que podría acumular una tasa de crecimiento anual de entre 13,5% a 14,5%, mucho menor al observado en el año anterior, y más cercano a los valores de tendencia.
Por su parte, los países sudamericanos alcanzaron un nuevo máximo histórico trimestral con un monto recibido de $6,784 millones, cifra superior en 8,3% a la del trimestre anterior y es 12,3% mayor la observada en el mismo trimestre del año pasado.
Argentina y Brasil fueron los países cuyas remesas crecieron más durante el segundo trimestre, 32,1% y 16,5% respectivamente comparado con el mismo trimestre del año anterior, impulsadas por la recuperación del empleo en los países donde radican los migrantes de estos países y por la depreciación del peso en el caso argentino.
Acorde con sus tendencias, las remesas que recibieron Chile y Ecuador crecieron 13.8% respecto a los valores del mismo trimestre del año anterior, mientras las remesas recibidas en Colombia y Perú crecieron un poco menos, 11.5% y 7.3% respectivamente. Las remesas que recibió Bolivia también crecieron, aunque un poco menos, solo 3.7% respecto a lo observado en el mismo trimestre anterior.
En el pronóstico para el cierre del año, se espera que la subregión reciba un monto de remesas superior al nivel de 2021 entre 13.5% y 14.5%.
Para los países caribeños en el segundo trimestre del año fueron $4,471 millones, cifra superior en 4,1% a la de trimestre anterior y ligeramente superior en 0,4% a la observada en el mismo trimestre del año pasado.
La República Dominicana fue el país cuyas remesas decrecieron durante el segundo trimestre, -9,2% impulsadas por el arrastre estadístico que provoca el incremento inusual observado en el mismo trimestre de 2021 y que hace que la tasa de este año se presente con signo negativo. De todas maneras, el monto recibido en el año es superior a los valores que se observaron antes de la pandemia, por lo que los flujos parecen converger a los valores de tendencia previos a la crisis.
Por esta misma razón las remesas que recibieron Jamaica y Trinidad y Tobago en el segundo trimestre del año son las que más crecieron, 9.9% y 43%, ya que en el año previo estas mostraron una tasa de crecimiento notoriamente menor (negativa en el caso de Trinidad y Tobago) a la de sus niveles de tendencia. Por su parte, las remesas que recibió Haití crecieron 1.8% respecto a las recibidas en el mismo trimestre del año anterior.
En el pronóstico para el cierre del año, se espera que la subregión reciba un monto superior en 2% a 3% de remesas.