Caficultores advierten riesgo de mano de obra y transporte
A las puertas de la nueva temporada de producción de café (2020-2021), los caficultores temen sentir el impacto del Covid-19, algo que no pasó en la actual cosecha porque la mayor parte del grano fue entregado a comienzos del año. .
Miguel Pon, Director Ejecutivo de la Asociación de Exportadores de Café (Ahdecafe), señaló que este año no se sintió el impacto del Covid-19 en el sector caficultor y por eso se cumplirá la meta de ingresos, no así la de producción.
“Esta cosecha 2019-2020 no vimos mayor impacto por el tema de la pandemia, pero en la cosecha 20-21 (comienza en octubre), el sector caficultor va a empezar a ver cuál es el impacto que puede tener”, advirtió.
Hay que recordar que la crisis comenzó en marzo cuando ya había salido la mayor parte de la producción, y se encontraba en bodegas y listo para procesar. Algo que cambiará si se extiende la pandemia.
La nueva cosecha comienza el próximo mes de octubre y el exportador tiene un pronóstico más conservador que el del presente año.
“Nosotros tenemos un pronóstico inicial de exportaciones para la cosecha 20-21 que puede ser muy similar a este año, puede rondar los siete millones a 7.2 millones, pero mucho depende de ese factor de la parte de la cosecha, del corte del café, si llegamos a tener problemas esto va a tener un impacto negativo, podríamos bajar las exportaciones para este año”, proyectó.
Ya en las zonas bajas del país está empezando a salir un poco de café y en los “meses de octubre y noviembre ya empieza lo que es la temporada y luego viene las zonas intermedias y altas que son de diciembre a febrero, más o menos, entonces mucho va a depender del movimiento de mano de obra, cómo va a estar el tema de la circulación de las personas que se dedican al corte”.
También está el tema del transporte del café desde las fincas y regiones hasta los beneficios de procesamiento para exportación en Villanueva y San Pedro Sula, donde están ubicados.
“El principal temor que tenemos todos como sector desde el productor hasta los exportadores de café, es precisamente eso, de que no se vaya a contar con la suficiente mano de obra o que vayamos a tener problemas para movilizar esa mano de obra, y, por ende, no se pueda cosechar todo el café, entonces eso sí podría tener un impacto negativo”, advirtió.
El IHCAFE aún no da su pronóstico de cosecha, pero sería cercana a la de los exportadores en espera que el precio se mantenga por arriba de los 100 dólares por quintal.