Luego de que el jueves la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados (Opep+) rechazaran la presión de Estados Unidos por aumentar la producción de crudo y mantuviera los planes ya estipulados, la materia prima retomó la senda alcista.
El crudo estadounidense WTI, de referencia para Honduras y la región, subió 2,99% a $81,17 el barril, mientras que el petróleo europeo Brent creció 2,29% a $82,39, según la última actualización del mercado de este sábado.
El grupo acordó mantener su plan de aumentar la producción de petróleo en 400.000 barriles por día (bpd) a partir de diciembre, ignorando los pedidos del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, de una producción adicional para enfriar el aumento de los precios.
El principal productor de la Opep, Arabia Saudita, desestimó los pedidos de aumentos más rápidos de bombeo de la organización, citando vientos económicos en contra.
No obstante, con los precios minoristas de la gasolina en Estados Unidos no muy lejos de los $4 el galón, considerado un punto de presión para los conductores locales, la carga recae en la Casa Blanca después de que Biden instó el sábado a los principales productores de energía del G-20 con capacidad de reserva a impulsar su producción.
La Casa Blanca dijo que evaluará una gama completa de herramientas a su disposición para garantizar el acceso a energía asequible después de la reunión de la Opep+.
El enfoque cambiará ahora a si Estados Unidos y otros países optan por liberar petróleo de sus reservas estratégicas (SPR, por sus siglas en inglés), dijo en una nota Giovanni Staunovo, analista de UBS.
“Si bien tal decisión generaría descensos en los precios, las SPR solo pueden llenar el vacío durante interrupciones temporales de la producción y no solucionar problemas estructurales de subinversión y aumento de la demanda”, dijo Staunovo. El banco espera que el Brent siga subiendo en dirección a los 90 dólares el barril durante los próximos meses.