Party City, la mayor empresa de artículos para fiestas en Estados Unidos, se acogió a un proceso de bancarrota, según documentos hechos públicos este miércoles en la Comisión del Mercado de Valores (SEC, por su sigla en inglés).
La deuda se sitúa en unos $1.670 millones y su liquidez es de $122 millones, según sus últimos resultados trimestrales de septiembre, en los que reportó unas pérdidas acumuladas de unos $240 millones, pese a unas ventas de $1.460 millones.
La empresa, que tiene 800 tiendas y emplea a 16.000 personas, con refuerzos estacionales en fechas como Halloween, se acogió al proceso este martes con el fin de reestructurar una creciente deuda derivada de las consecuencias de la pandemia y la coyuntura económica.
La deuda de Party City se sitúa en unos 1.670 millones de dólares y su liquidez es de 122 millones, según sus últimos resultados trimestrales de septiembre, en los que reportó unas pérdidas acumuladas de unos 240 millones, pese a unas ventas de 1.460 millones.
En un comunicado para informar de la bancarrota y la restructuración, la firma indicó que de momento ha obtenido un préstamo de 150 millones de dólares que le permitirá seguir con sus operaciones, incluyendo el pago a empleados y proveedores.
El negocio de Party City, que vende disfraces, globos, dulces y decoración, entre otros productos, iba viento en popa hasta la llegada de la pandemia, cuando tuvo que cerrar sus tiendas temporalmente y los consumidores recortaron el gasto en celebraciones por las restricciones para disfrutar del ocio en persona.
Después se vio afectado por los problemas de la cadena de suministro, que llevó también a una escasez de helio, y finalmente ha visto bajar sus ventas debido al aumento de precios en el país y a la aparición de competidores.
Las acciones de la empresa subieron más de un 7 % en Wall Street este miércoles a raíz de la noticia, pero en el último año su capitalización, de 42 millones, se ha desplomado cerca del 93 %.