Honduras dijo que desplegará “7.000 policías y personal militar para la contención de migrantes”
El gobierno de Estados Unidos, como parte del “plan de apoyo” a Centroamérica, acordó con México, Guatemala y Honduras un “incremento” de tropas en las fronteras de estos países, en un intento por contener a los migrantes que buscan llegar a suelo estadounidense.
En su conferencia de prensa diaria, la vocera de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo que “ha habido una serie de discusiones bilaterales entre nuestros líderes y los gobiernos regionales de México, Honduras y Guatemala”. Como parte de esas discusiones, los países en cuestión, explicó, se comprometieron “a incrementar la seguridad fronteriza”.
En el caso de México, Psaki comentó que el país decidió “mantener 10.000 efectivos en la frontera sur, lo que ha resultado en el doble de detenciones de migrantes diarias”.
Guatemala, por su parte, se comprometió a desplegar “mil 500 policías y personal militar en su frontera con Honduras y acordó establecer 12 puestos de control fronterizo en la ruta migratoria”. Honduras dijo que desplegará “7.000 policías y personal militar para la contención de migrantes”.
Psaki dijo que estas discusiones con los países implicados “ocurrieron a diversos niveles”, pero no detalló con quién se hizo el acuerdo.
El pasado 7 de abril, la vicepresidenta Kamala Harris, designada por el presidente Joe Biden para coordinar los asuntos migratorios con México y Centroamérica, sostuvo una conversación telefónica con Andrés Manuel López Obrador, en la que el mandatario mexicano dijo que su gobierno está dispuesto a “sumar voluntades en el combate al tráfico de personas y protección de los derechos humanos de los migrantes”, sobre todo en el caso de menores.
Psaki admitió que los acuerdos para incrementar el número de tropas en las fronteras “se alcanzaron en las últimas semanas”. El objetivo del acuerdo, subrayó, es “hacer más difícil el viaje para los migrantes y hacer más difícil cruzar las fronteras”.
Poco antes, la asesora especial del presidente sobre inmigración para el Consejo de Política Nacional, Tyler Moran, dijo a la cadena MSNBC que “hemos asegurado acuerdos para que pongan más tropas en su propia frontera. México, Honduras y Guatemala han acordado hacer esto. Eso no sólo evitará que los traficantes, los contrabandistas y los cárteles se aprovechen de niños, sino que también los protegerá”.
La Casa Blanca ha insistido en que la frontera “está cerrada” y en que la mayoría de quienes lleguen sin documentos serán expulsados, pero eso no ha rebajado las llegadas a la zona limítrofe, sobre todo las de menores solos.
El Ejecutivo de Biden ha recibido críticas porque muchos menores que han cruzado la frontera se han quedado más tiempo del permitido por ley en centros de detención gestionados por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza estadounidense (CBP, en inglés), que no están diseñados para niños.