Cuando una persona escoge un país para vivir y para trabajar, seguramente lo hace pensando en qué tan cómodo se sentirá viviendo allá, cuál será la estabilidad económica que tendrá y hasta qué punto puede llegar su crecimiento personal y laboral.
El Índice de Oportunidades de Henley le ayuda a usted a medir cómo la educación superior, junto con la ciudadanía, basada en la inversión, le ayuda a preservar o aumentar la riqueza a pesar del paso generacional.
Permite a los inversionistas y a sus hijos identificar ubicaciones con ecosistemas óptimos para desarrollar sus redes globales y maximizar sus perspectivas profesionales, potencial de ingresos y movilidad económica para un mayor éxito y prosperidad a lo largo de sus vidas.
Este índice clasifica los 46 principales destinos de emigración en función de seis parámetros: potencial de ingresos, avance profesional, perspectivas de empleo, educación, movilidad económica y habitabilidad, cada uno con una puntuación de 100.
El primer país ubicado en este índice es Suiza, el cual cuenta con una puntuación general de 84. Lo que más se destaca es el potencial de ganancias (100), junto a la movilidad económica (92), las perspectivas de empleo (85) y el avance profesional (81).
En el segundo renglón aparece Singapur con puntuación general de 79. Para este país se destaca el potencial de ganancias (100), las perspectivas de empleo (99), la movilidad económica (92) y la alta habilidad (64).
El podio lo cierra Estados Unidos con una puntuación de 89. En el gigante norteamericano se destaca el potencial de ganancias (89), las perspectivas de empleo (85), junto al avance profesional y la movilidad económica, ambos con una puntuación de 75.
El listado continúa con Australia (76), Canadá (73), Reino Unido (70), Emiratos Árabes Unidos (67), Nueva Zelanda (65), Austria (65), Italia (64) cierra el TOP 10. Les siguen Hong Kong (61), Letonia (60), Malta (59), Hungría (58), Grecia (56) y Portugal (56).
Tess Wilkinson, directora de Henley & Partners Education, señala que una educación de primera clase por sí sola ya no garantiza el éxito en un mercado laboral mundial cada vez más competitivo.
“Aunque los estudios confirman que los titulados superiores ganan alrededor de un 50% más que los que sólo tienen estudios secundarios, las investigaciones también revelan que más de dos tercios de la disparidad de ingresos en todo el mundo viene dictada por el país en el que vive y trabaja una persona”, señala.
“Dado que las barreras a las oportunidades a menudo vienen dictadas por las limitaciones de nuestra ciudadanía, el índice presenta argumentos convincentes a favor de la inversión en migración como estrategia que cambia las reglas del juego para las familias que buscan trascender las limitaciones de la -lotería del derecho de nacimiento-“, añade.