La deuda externa registrada por el sector privado a marzo anterior sigue acelerando y 3.560 millones de dólares, superior en 167.2 millones de dólares en comparación con el saldo presentado a diciembre de 2024 ($3,393.1 millones).
El año pasado la deuda externa privada aumento 23%, un indicativo del alza interanual.

La mayor parte de la deuda es por préstamos directos con 2.621 millones de dólares, en Títulos Valores 440 millones, 369 millones en depósitos, además de 128 millones en Otros Pasivos de Deuda y 1.1 millones de dólares en créditos comerciales.
Contrario al gobierno que registra menos desembolsos en los primeros eses del año, el sector privado registra una utilización neta de 153.9 millones de dólares, producto de “mayores desembolsos recibidos por 651.7 millones de dólares frente a las erogaciones de capital por 497.8 millones de dólares, junto con una variación cambiaria (devaluación) desfavorable que aumentó el saldo en 13.3 millones de dólares”.
De los desembolsos percibidos, 650.4 millones de dólares correspondió al Sector Privado Financiero (SPrF) y 1.3 millones por el Sector Privado No Financiero (SPrNF).
Por otro lado, el servicio de deuda externa cancelado sumó 541.5 millones, destinando el 91,9% ($497.8 millones) para amortización de capital y el 8,1% restante ($43.7 millones) para honrar costos financieros tales como intereses y comisiones.