En los últimos dos años, las pérdidas de la estatal de telecomunicaciones casi se han duplicado
La Empresa Hondureña de Telecomunicaciones (Hondutel) tiene serios problemas para mantenerse operativa. El conflicto es de larga data y sin soluciones a la vista de acuerdo a sus resultadOs financieros.
Si se tiene en cuenta que los registros de 2023 volvieron arrojar pérdidas para la estatal, esta vez en el orden de las 191.2 millones de lempiras (-229 millones en noviembre), una cifra similar a la de 2022 (L191.573.783.50).
En dos años las pérdidas casi se han duplicado. Según el informe financiero de Hondutel “las pérdidas acumuladas a diciembre de 2023 son de 803 millones 308.343 lempiras”.
El pasivo y patrimonio cerró el año en 7.287 millones de lempiras (L7,287,833.335.00).
Las pérdidas han venido en ascenso acelerado desde 2018 cuando habían sumado 204 millones de lempiras, creciendo 51% al año siguiente. En 2017, había arrojado utilidades por 52.2 millones de lempiras.
El bajo resultado tiene su principal explicación en la caída de ingresos por venta de servicios. En 2018 este ítem significaba una facturación de 1.510,5 millones de lempiras y el año pasado cayó a 443 millones. Se redujeron los recursos recibidos tanto de servicios nacionales como internacionales.
La demanda de más recursos para Hondutel ha sido una constante en los últimos gobiernos, pero no han encontrado eco en los bancos multilaterales y se deja el tema en manos de privados.
El año pasado se contrataron recursos bancarios a nivel interno para pagar salarios y “retiro voluntario” de empleados, pero fue insuficiente para cubrir ambas necesidades.
