La tasa de empleo en la mayoría de países de América Latina y el Caribe sigue por debajo de los niveles previos a la pandemia de covid-19, con Colombia y Brasil como los que tienen la mayor brecha de recuperación y Honduras el que más empleos perdió en Centroamérica, según datos de una nueva encuesta del Banco Mundial y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (Pnud).
Los organismos multilaterales realizaron una serie de encuestas telefónicas de alta frecuencia en 24 países de la región, para determinar el nivel de bienestar de las familias, así como de su percepción de la crisis.
El informe detalla que la tasa de empleo de Colombia y Brasil está 17 puntos porcentuales por debajo de la tasa prepandémica. Les sigue Ecuador, con 14 puntos porcentuales.
Según el informe, Honduras es el cuarto país de América Latina, después de Haití, Colombia y Panamá, y el primero en Centroamérica, que más empleos ha perdido tras la pandemia, con un 32% de trabajos destruidos y aproximadamente la mitad de los adultos en edad productiva que abandonaron la fuerza laboral después de quedar desempleados durante la pandemia.
Para la región en su conjunto, la tasa de empleo se ubicó en alrededor de 62%, casi 11 puntos porcentuales por debajo del nivel anterior a la pandemia en 2019.
El informe agrega que solo en Guatemala, Nicaragua y El Salvador la tasa de empleo supera ligeramente los niveles anteriores a la crisis.
“El impacto de la pandemia ha sido sumamente duro para millones de familias en la región. Estas encuestas son clave para contar con datos actuales del alcance de la crisis y para recomendar medidas informadas, que contribuyan a mejorar la calidad de vida en nuestros países”, explica Carlos Felipe Jaramillo, vicepresidente del Banco Mundial para América Latina y el Caribe.
El informe también revela que las mujeres son las más afectadas por la crisis, ya que para ellas no solo fue más fuerte el impacto inicial, sino que también la recuperación del mercado laboral ha sido más lenta.
Entre la población femenina que más se ha visto afectada están las madres de niños de entre 0 y 5 años. Un año y medio después del inicio de la crisis, la probabilidad de las mujeres de haber dejado de trabajar a raíz de la pandemia es dos veces más alta que la de los hombres. Además, esto ha estado acompañado de una mayor carga de tareas domésticas, incluyendo la supervisión de la educación remota de los niños, y una mayor incidencia de problemas de salud mental.
Por su parte, el empleo formal cayó 5,3% en la región, mientras que el trabajo independiente creció 5,7%. La proporción de trabajadores ocupados en negocios pequeños, de hasta cuatro trabajadores, aumentó 8%, lo cual muestra un deterioro en la calidad del empleo disponible.
Hogares latinos siguen luchando por recuperar ingresos de prepandemia
Los resultados negativos del mercado laboral se reflejan en los ingresos de los hogares, ya que casi el 50 por ciento de todos los hogares en la región todavía luchan por devolver sus ingresos totales a los niveles previos a la pandemia.
Para algunos países, como Guatemala (21 puntos porcentuales), Honduras (18 pp) y El Salvador (18 pp), la recuperación es visible y la proporción de hogares que reportan su ingreso total es por debajo de los niveles prepandémicos ha disminuido considerablemente en comparación con mediados de 2020.