La política monetaria hondureña ha llevado a una “ganancia teórica” de competitividad con sus socios comerciales de -0,57% al mes de julio, pero con un alto costo al registrar la mayor inflación y devaluación en Centroamérica.

Mientras en tres países de la región (Costa Rica, El Salvador y Panamá), se registra una inflación interanual negativa, en Honduras fue de 4,41%. Guatemala registró 1,17% y Nicaragua 0,64%.
El promedio centroamericano fue de 0,37%, el del resto del mundo 1,92%. Honduras incluso supera a México que cerró julio con una inflación interanual de 3,51%.
En relación a la devaluación, Honduras va contra la corriente regional y mundial. Mientras las monedas de Costa Rica (-4,12%), Guatemala (-0,89%), se apreciaron en siete meses, en Honduras la devaluación acumulada fue de 5,84%.
El Salvador y Panamá, por ser economías dolarizadas, no tuvieron cambios, y Nicaragua mantiene su moneda casi sin cambios con apenas 0,08%.
En el resto del mundo se registró una apreciación frente al dólar de -3,82% y en la Zona Euro de -7,17%.
El Banco Central, en su informe del Índice de Tipo de Cambio Efectivo Real (ITCER), destaca que el diferencial cambiario genera “mejores condiciones de competitividad comercial para el sector exportador hondureño”.
Por su parte, la evolución de la inflación doméstica respecto al promedio ponderado de la inflación de los socios comerciales relevantes aminoró el resultado observado.
“En términos generales, una ganancia teórica de competitividad mejora la balanza comercial al impulsar las exportaciones en contraste con la moderación en el alza de las importaciones y a su vez estimulando la inversión extranjera, al fortalecer la competitividad y la posición externa del país, reflejado en un mayor nivel de reservas internacionales”, apunta la Autoridad Monetaria.