La venta de combustibles es un negocio creciente y rentable en el país, pero los gasolineros nacionales están pidiendo al gobierno (Insep) una veda de seis meses en el otorgamiento de permisos para abrir nuevas estaciones de servicio.
La directora de la Asociación Hondureña de Distribuidores de Productos Derivados del Petróleo (Ahdippe), Sarahí Silva, sostiene que hay una “proliferación” de estaciones de servicio con cerca de “60 proyectos al año”.
La dirigente puso en duda la supervisión estatal sobre la “rentabilidad” del negocio ya que se necesitan inversiones de 10 a 20 millones de lempiras.
“Hay una proliferación de gasolineras, en nuestras oficinas estamos registrando proyectos nuevos entre 60 proyectos al año, de hecho en una semana recibí 13 proyectos nuevos para gasolineras”, indicó.
Si bien es cierto el parque vehicular aumenta, agrega, debería de respetarse los estudios económicos para ver si realmente son rentables, “porque hay una preocupación a lo interno de nuestro gremio en el sentido de dónde sale tanta gasolinera, pues, una inversión es de 10 a 20 millones”.
Unas 600 gasolineras operan en el país. La mayor parte pertenece a transnacionales.
“Además, está el tema de las bombas de patio, tenemos muchas denuncias de nuestros asociados de que están con competencia desleal, son para consumo propio y se dedican a vender, esto no tiene ningún control y a parte de eso también es una fuga de impuestos para el Gobierno”, dijo Silva.
La veda sería por seis meses lo que permitiría un mejor control del mercado, opina la directora de la Ahdippe.