La calificadora Fitch Ratings ratificó la clasificación internacional de riesgo emisor (IDR; issuer default rating) en moneda local y extranjera de la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC) Tegucigalpa en ‘B+’. La Perspectiva es Estable. Al mismo tiempo afirmó la clasificación IDR de corto plazo en ‘B’.
Las acciones de clasificación reflejan la expectativa de que el margen operativo y las métricas de sostenibilidad de la deuda se mantendrán en rangos similares a pares de clasificación en la categoría de ‘B’, a pesar del impacto observado por la contingencia sanitaria. La evaluación también incorpora la tendencia histórica de crecimiento del gasto de capital que, de mantenerse, necesitaría cubrirse con endeudamiento adicional. El perfil crediticio individual (PCI) se evalúa en ‘b+’.
Perfil de Riesgo – ‘Vulnerable’: El perfil de riesgo refleja la combinación de dos factores clave de riesgo evaluados en rango ‘Medio’ y cuatro en rango ‘Más Débil’. El perfil ‘Vulnerable’ refleja un alto riesgo relativo con respecto a pares internacionales que el flujo de efectivo disponible para servir el servicio de deuda pueda debilitarse más allá de lo esperado en el horizonte de proyección (2021 a 2025). Asimismo, incorpora el marco institucional nacional débil en el cual operan los gobiernos locales y regionales en Honduras.
Solidez de Ingresos – ‘Más Débil’: Las fuentes de ingresos del Distrito Central son fuertes y predecibles. De tal forma, la mayoría de sus ingresos operativos están conformados por ingresos propios como impuestos, tasas y derechos (2020: 94%), el crecimiento de estos fue contenido por el cierre económico provocado por la pandemia.
En términos reales, el ingreso operativo (tributario, no tributario y transferencias) decreció 0.3% en el período 2016 a 2020 en comparación con el crecimiento real del PIB nacional de 1.4%. En términos reales, en 2020 el ingreso operativo decreció 14,1%, superior a la disminución real del producto interno bruto (PIB) de 9%, como consecuencia de una recaudación por ingresos propios (tributarios y no tributarios) por debajo de la esperada. Así, la recaudación tributaria decreció 24.7% en términos nominales mientras que el ingreso operativo disminuyó 11.1% con respecto a 2019.
Durante 2020, año de la pandemia, la situación de contingencia sanitaria provocó la redistribución del gasto hacia rubros sociales y de sanitización que compensaron los ahorros en el gasto operativo. De manera general, respecto a 2019, el gasto operativo se incrementó 6,2% mientras que el balance operativo disminuyó 22,9%; a pesar de ello éste se mantuvo fuerte y representó 51.5% de los ingresos operativos.
Millonaria deuda
Al cierre de 2020, la deuda de largo plazo está en HNL4,605 millones; mientras que la deuda de corto plazo cerró en HNL1,577 millones. Toda esta deuda es con la banca comercial. El costo promedio de la deuda fue de 10.2%. El pago de esta deuda se realiza a través de un fideicomiso, este mecanismo brinda certeza y predictibilidad a su pago.
Al cierre de julio 2021, la deuda directa cerró en HNL4,549 millones, HNL1,263 millones era deuda bancaria de corto plazo. En el escenario de clasificación, la deuda neta ajustada se proyecta en HNL11,297 millones hacia 2025; la cierre de 2020 fue de HNL4,605 millones, sustentado en las altas necesidades de inversión en sectores como transporte público, vialidades y agua. Fitch estima que el programa de inversiones de la ciudad se mantenga.
En su escenario de clasificación, Fitch calcula la razón de repago (deuda neta ajustada con respecto al balance operativo) en 8.9 años para el período de 2021 a 2025. Esta es la métrica primaria para evaluar la sostenibilidad de la deuda y se ubica en un puntaje de ‘aa’.
Fitch ajusta una categoría la evaluación de esta métrica primaria para reflejar una cobertura del servicio de la deuda (balance operativo con respecto al servicio de la deuda que incluye la deuda de corto plazo) menor a 1.0x en el escenario de clasificación. Así, el resultado final de la sostenibilidad de la deuda es un puntaje de ‘a’.
Advierte que la calificación puede bajar si ocurre un “deterioro sostenido de la razón de repago que ubique este indicador por arriba de 9x, como consecuencia de una menor generación de margen operativo, en combinación con una cobertura del servicio de deuda por debajo de 1.5x, podría derivar en un ajuste a la baja en las clasificaciones IDR”. Además por una evaluación desfavorable frente a pares de clasificación.