Se trata de un aumento del 38% en relación al mes de enero
La estrategia del Gobierno en el sector de energía no está dando resultados debido a la acumulación de las deudas. La Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) confirmó que al cierre del primer semestre, la deuda con los generadores privados es de casi 17.000 millones de lempiras, unos 5.400 millones más que en el mes de enero.
Según el Departamento de Contabilidad de la ENEE, se tienen cuentas por pagar a los “Proveedores por 19.922 millones de lempiras” (eran 16.479 millones en enero), siendo la deuda con los generadores de energía los primeros en la lista.
A los generadores renovables se les adeuda “11.684 millones de lempiras”, un aumento de 2.832 millones (casi 32%) en relación al mes de enero cuando sumaba 8.852 millones de lempiras.
A los generadores térmicos (que utilizan combustibles), les va peor, ya que la deuda casi se duplicó al pasar de 2.652 millones de lempiras en enero a “5.283 millones de lempiras”, al 30 de junio anterior. Es un alza de 2.631 millones de lempira (99%).
La renegociación de contratos ha paralizado los pagos que siguen creciendo a medida que se consume energía. Hay que destacar que la ENEE reporta un aumento en la recaudación por cobro de energía.
Deuda con bancos y déficit
Aunque la deuda con los proveedores es importante, el mayor endeudamiento de la ENEE es con la banca privada, tanto interno como externa, que supera los 53.700 millones de lempiras. Esto incluye préstamos con los bancos multilaterales, banca privada y la colocación de Bonos Soberanos, de año anteriores, supuestamente adquiridos para cancelar la deuda con proveedores.
Al cierre de junio esta deuda bancaria aumentó un poco más de 2.000 millones de lempiras, en relación a junio de 2021, ya que se han hecho los pagos correspondientes en su mayoría.
Al sumar deudas, intereses, presupuesto (pago de salarios y gastos), inversiones, etc y restar los ingresos, la ENEE reporta un déficit acumulado de “70.187 millones de lempiras”, al que se sumarían las pérdidas administrativas de los primeros seis meses del año.
Salomón Ordóñez, asesor del Cohep en energía, reitera que “la prioridad número de este gobierno tenía que ser el control y reducción de pérdida, pero hasta esta fecha no la han hecho. Entendemos que para eso es que están pidiendo un presupuesto mayor para el 2023 porque claro, la reducción de pérdidas requiere contratar hasta dos mil personas con vehículos y equipo especializado de comunicaciones”.
“Desafortunadamente eso quiere decir que el programa no ha arrancado y que la ENEE sigue sufriendo el desangramiento financiero fuertísimo que causan las pérdidas que este año podrían superar los 10 mil millones de lempiras”, añadió.