La Asamblea Nacional de Nicaragua ratificó el decreto presidencial emitido por Daniel Ortega y publicado en La Gaceta, Diario Oficial, en el que se autoriza el ingreso a partir del 1 de julio, de efectivos, equipos militares, naves y aeronaves de Rusia, Estados Unidos, Venezuela, Cuba, México y la Confederación de Fuerzas Armadas Centroamericanas, para la realización de ejercicios militares con fines humanitarios.
Durante el debate de aprobación, los diputados orteguistas cuestionaron duramente los señalamientos a esta iniciativa hechos por funcionarios de Estados Unidos. El trámite fue aprobado por carácter de urgencia por solicitud de Ortega, con 78 votos a favor y 11 abstenciones.
Este es un proceso rutinario que se da dos veces al año en Nicaragua. Sin embargo, la propaganda oficialista del Gobierno de Vladimir Putin, en Rusia, “sobredimensionó” este ingreso de tropas militares de su país en Nicaragua, intentando enviar un mensaje de amenaza a Estados Unidos, con quien históricamente mantiene tensas relaciones.
Las tensiones entre ambas potencias aumentaron tras la invasión rusa en Ucrania, que inició el pasado 24 de febrero, y ha sido condenada a nivel mundial, pero respaldada por el régimen de Daniel Ortega en Nicaragua.
Incluso el mismo subsecretario de Estado de Estados Unidos para Asuntos del Hemisferio Occidental, Brian Nichols, calificó la presencia de tropas rusas en Nicaragua como “una provocación”.
“Invitar a las fuerzas rusas, a las tropas rusas a ejercicios, aunque sean humanitarios en el momento que ese país está invadiendo un país vecino, e incurriendo en violaciones a los derechos humanos en Ucrania, nos parece una provocación por parte del régimen nicaragüense, y es algo un poco peligroso para nosotros”, declaró ante el servicio alemán de noticias en español, Deutsche Welle.
El diputado orteguista Filiberto Rodríguez, presidente de la Comisión de Gobernación, fue quien despuntó en sus ataques en contra de los Estados Unidos y los medios de comunicación independientes nacionales e internacionales.
“Estos son intercambios y relaciones tradicionales. Hemos escuchado en los medios de comunicación chachalaca, en medios donde cacaraquean como gallinas muchos, incluyendo este señor de Estados Unidos, Brian Nichols, diciendo que Nicaragua le abre las puertas a Rusia en Centroamérica. Que no sabe este señor, que está desinformado, que esto es una tradición de ejércitos, igual que viene el Ejército de los Estados Unidos, el Comando Sur de los Estados Unidos”, expuso Rodríguez en su intervención.
Sin embargo, elpresidente de Costa Rica, Rodrigo Chávez, declaró la “preocupación” de su Gobierno porque “hay una noticia de que el presidente Daniel Ortega, invitó al Ejército ruso a enviar tropas y equipos a Nicaragua. Nosotros no tenemos Ejército desde el año 1949. Imagínese cómo nos sentimos: preocupados, con mucha razón”, argumentó.
¿Propaganda rusa?
La polémica por este decreto inició cuando la presentadora de la televisión oficial rusa, Olga Skabeeva, reportó que Ortega autorizó el ingreso de tropas militares, barcos y aviones rusos a Nicaragua, para el segundo semestre de 2022. Luego, la periodista agregó que “si sistemas de misiles americanos, pueden estar cerca de Moscú desde el territorio de Ucrania, es hora de que Rusia despliegue algo poderoso más cerca de una ciudad estadounidense”.
El anuncio de la presentadora rusa coincidió con la difusión del decreto presidencial en el que Ortega autorizaba la entrada a Nicaragua de tropas, equipos, naves y aeronaves militares “con fines humanitarios y ejercicios”.
En primer lugar, el decreto indica que las tropas de Rusia en Nicaragua participarán en ejercicios de adiestramiento e intercambio en operaciones de ayuda humanitaria, misiones de búsqueda, salvamento y rescate en situaciones de emergencia o desastres naturales, con la Unidad Humanitaria y de Rescate Comandante William Joaquín Ramírez Solórzano, del Ejército de Nicaragua.
Otro componente de este intercambio con Rusia comprende “ejercicios de adiestramiento e intercambio en operaciones de ayuda humanitaria, misiones de búsqueda, salvamento y rescate en situaciones de emergencia o desastres naturales, con las fuerzas terrestres, Fuerza Aérea y Fuerza Naval del Ejército de Nicaragua”.
El tercer componente se refiere a “intercambio de experiencias, adiestramiento, operaciones en contra de ilícitos en espacios marítimos en el Mar Caribe y aguas jurisdiccionales en el Océano Pacífico de Nicaragua, con la Fuerza Naval del Ejército de Nicaragua”.
El último componente menciona la “participación con miembros de la Fuerza Naval, Fuerza Aérea y Cuerpo de Transmisiones Blanca Stella Aráuz Pineda del Ejército de Nicaragua, en intercambio de experiencias y de comunicación operacional con naves y aeronaves del Ejército de Nicaragua en labores de enfrentamiento y lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado”.