Por lo menos 2.400 millones de lempiras promete el gobierno desembolsar en créditos para pequeñas y medianas empresas en los próximos tres meses para mitigar la crisis de migración de compatriotas hacia Estados Unidos.
Sin embargo, el economista Gustavo Aguilar, señala que modificar los procedimientos del sistema financiero no es tan fácil y menos cuando se ofrece la mediación del Banco Hondureño para la Producción y Vivienda (Banhprovi).
“Habría que verlo si eso es real, porque no es a través del sistema financiero nacional, sino con Banhprovi que coloca recursos del Estado a través del sistema financiero”, señaló el ex director del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep).
En esta intervención de recursos, explicó, hay procedimientos donde la garantía y el sujeto de crédito tienen que ser valoradas.
“Allí viene otra vez el mismo problema. No le presto porque no tiene garantías, no le presto porque no tiene capacidad de pago, no le presto porque el negocio no es factible, etc”, agregó.
Entonces se necesitarán las garantías solidarias, entre otras personas que no tengan una garantía real o a través del ente gubernamental de Garantías Recíprocas que generará un costo adicional.
“Es importante ver que es una emergencia, sin embargo es también una oportunidad de revisar la política económica y resolver el problema a mediano y largo plazo para un desarrollo empresarial real”, estimó Aguilar, quien fue directivo de la Asociación Hondureña de Instituciones Bancarias (Ahiba).
“La mayoría de los migrantes se van por falta de empleo y éste no llega de manera espontánea, sino que hay que hacer una gestión de desarrollo empresarial y tienen que ver las empresas y por eso aprobar medinas complementarias”, concluyó.
La semana pasada la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS), analizaba las garantías necesarias para desembolsar fondos para el sector productivo, incluyendo a cafetaleros y afectados por las lluvias.