La construcción de viviendas unifamiliares en Estados Unidos cayó en abril, ya que los aranceles sobre los materiales importados y las altas tasas hipotecarias siguieron siendo obstáculos importantes para el mercado inmobiliario.
La construcción de viviendas unifamiliares, que representa la mayor parte de la construcción de viviendas, cayó un 2,1 % hasta una tasa anual ajustada estacionalmente de 927 000 unidades el mes pasado, según informó la Oficina del Censo del Departamento de Comercio.
Los aranceles agresivos y erráticos del presidente Donald Trump, incluidos los impuestos sobre la madera y el acero, han dejado a los constructores en una situación delicada. Estados Unidos y China redujeron la tensión de su guerra comercial durante el fin de semana, pero sigue habiendo incertidumbre sobre lo que sucederá después de la tregua de 90 días que acordaron. Tampoco hay claridad sobre el destino de los aranceles específicos para cada país, que se retrasaron hasta julio.
Una encuesta de la Asociación Nacional de Constructores de Viviendas realizada el jueves mostró que la confianza entre los constructores de viviendas unifamiliares se desplomó en mayo hasta su nivel más bajo en un año y medio, con un 78 % de los constructores que declararon «dificultades para fijar los precios de sus viviendas recientemente debido a la incertidumbre sobre los precios de los materiales».
También hay un exceso de viviendas nuevas sin vender, con un inventario que alcanza niveles no vistos desde finales de 2007. Los permisos para la construcción futura de viviendas unifamiliares disminuyeron un 5,1%, hasta una tasa de 922 000 unidades en marzo.
La inversión residencial, que incluye la construcción de viviendas, se recuperó en 2024 tras las fuertes caídas de los dos años anteriores causadas por el aumento de los tipos hipotecarios. Creció a un ritmo moderado en el primer trimestre de 2025.
