Las tarifas aéreas en Europa y Asia están empezando a estabilizarse o a bajar, en una señal de que el prolongado auge de los viajes tras el COVID está menguando, lo que supone un revés para las compañías aéreas que luchan por una disponibilidad limitada de aviones.
Un desequilibrio global entre la oferta de vuelos y la demanda reprimida al abrirse el transporte aéreo tras la pandemia hizo subir los precios de los billetes y el rendimiento por pasajero, una medida de la tarifa media pagada por milla por cada pasajero.
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Pero los ejecutivos del sector, los inversores y los analistas afirmaron que la tendencia de “viajar a toda costa” se está equilibrando, ya que algunos clientes se están volviendo más sensibles a los precios al tener que hacer frente a la inflación que ha disparado el coste de la vida.
El consejero delegado de la aerolínea de bajo coste Ryanair, Michael O’Leary, advirtió este mes de que los precios de los billetes crecerían menos de lo previsto, lo que hizo caer las acciones de las aerolíneas europeas.
“Es un poco sorprendente que los precios no hayan sido más fuertes y no estamos muy seguros de si eso es sólo el sentimiento del consumidor o la sensación de recesión en toda Europa”, dijo O’Leary.
Las tarifas se mantuvieron planas en todo el bloque en los primeros meses de este año en comparación con 2023, según muestran los datos del grupo de investigación de viajes ForwardKeys.
El panorama es más crudo en Asia-Pacífico, donde las tarifas han bajado más, alrededor de un 16% en el periodo enero-abril en términos interanuales, según los datos.
Singapore Airlines registró la semana pasada un beneficio anual récord, pero el crecimiento del beneficio neto cayó en los tres últimos trimestres. La aerolínea asiática de referencia afirmó que espera que los rendimientos por pasajero sigan moderándose a medida que las compañías aéreas amplíen su capacidad.
Asia ha tardado más que otras regiones en levantar las restricciones y aumentar los vuelos a destinos extranjeros.
Los viajes a mercados como Europa, América y Australia desde China no se han recuperado. La economía china está aletargada y los vuelos internacionales se mantienen en torno al 70% de los niveles anteriores a la pandemia – sólo un 16,5% en las rutas entre EE UU y China.
Flight Centre Travel Group declaró que las tarifas aéreas internacionales vendidas en Australia cayeron un 12,8% interanual en los tres primeros meses del año. Aún así, los precios en Asia-Pacífico han subido más de un 7% en comparación con 2019, con tarifas un 70% más altas en 2021 en comparación con 2019.
Destinos más baratos como Turquía, Rumanía y los Balcanes están ganando popularidad entre los viajeros europeos que buscan alternativas a Francia o Italia, afirmó.
Los datos de la Comisión Europea de Viajes mostraron que los consumidores iban a gastar 742.800 millones de euros (803.000 millones de dólares) en el continente este año, un 14,3% más que el año pasado. Pero esto podría deberse en gran medida a los turistas estadounidenses más ricos, según los expertos del sector.
EE UU en alza
Mientras los europeos buscan ahorrar, el gasto de los consumidores estadounidenses se mantiene, con una demanda especialmente fuerte de viajes de lujo.
Alrededor de 16 millones de estadounidenses viajaron al extranjero en el primer trimestre de 2024, marcando un nuevo récord y superando los volúmenes anteriores a la pandemia, según el Mastercard Economics Institute.
La confianza del consumidor en EE UU subió en mayo
Los economistas afirmaron que la solidez del mercado laboral estadounidense está ayudando a los consumidores a mantener un gasto más elevado a pesar de la reducción del ahorro familiar.
El gasto medio en viajes por hogar estadounidense cayó sólo un 1,5% interanual en los cinco primeros meses del año, pero fue un 13% superior en comparación con 2019, según muestran los datos de las tarjetas de crédito y débito de Bank of America.
Los ejecutivos de las aerolíneas mundiales afirmaron que los consumidores siguen queriendo gastar en viajes, priorizando las experiencias sobre los bienes.