La multinacional Millicom, con sede en Luxemburgo y con 49,98% de TigoUNE, lanzó una nueva propuesta a su socio EPM (Empresa Pública Medellín) que posee 49,99% de las acciones, para capitalizar y “salvar” la compañía.
La empresa que tiene hasta la segunda semana de octubre para cumplir sus deudas con Bancolombia y el pago de bonos, podría enfrentar el default si no logra capitalizarse. Sin embargo, Millicom y EPM no logran ponerse de acuerdo con la exigencia de aportar unos 150 millones de dólares.
Millicom le envió una nueva carta a EPM, con copia al Ministerio de las TIC, en la que proponen a la empresa colombiana que entre las dos, y de manera conjunta, cada una capitalice de a $300.000 millones ($150 millones) vía emisión de nuevas acciones.
El objetivo es lograr los 600.000 millones de pesos ($300 millones) que le darían vida a Tigo, empresa con más de 15 millones de usuarios.
A diferencia de una propuesta previa, es que Millicom le da la opción a EPM de activar una “Cláusula de Protección del Patrimonio Público”. Esto permite enajenar acciones en caso de que no quieran seguir con el negocio, como dice la figura, protegiendo el patrimonio de EPM y permitiéndoles vender.
“Para mejorar la liquidez de EPM respecto de su inversión en UNE, Millicom extendería a favor de EPM y hasta el 31 de diciembre de 2026 la así conocida “Cláusula de Protección del Patrimonio Público”. Ello mejora significativamente la liquidez que EPM tiene respecto a su inversión en UNE y permitiría a EPM gozar de tiempo adicional para, de así decidir hacerlo, acometer una eventual venta de su participación en UNE, en mejores y más líquidas condiciones”, señala la carta.
Con esta tercera propuesta, agrega, EPM no se ve enfrentada a una dilución, apoya a UNE de manera inmediata, mantiene su participación en la empresa y evita que la misma entre en insolvencia.
Además, EPM logra una importante y valiosa extensión a sus derechos de liquidez y dispondría de tiempo adicional para decidir cuál de sus opciones prefiere elegir, a su total arbitrio y con plena sujeción a todos los requerimientos y plazos que su gobierno corporativo le exija cumplir.