El Producto Interno Bruto (PIB), que es el valor de la producción nacional de bienes y servicios, cerró el II trimestre del año con un alza de 0,5% en relación al primer trimestre cuando el Banco Central reportó un 0,9% de crecimiento. El BCH revisó la cifra del primer trimestre y la bajó a 0,8%.
“Durante el II trimestre de 2022 la economía hondureña registró crecimiento de 0,5% respecto al primer trimestre del año, según la serie desestacionalizada del PIB Trimestral (PIBT); mientras que, la variación interanual fue de 3,8% en comparación a lo registrado en similar trimestre del 2021”, informó el BCH.
La autoridad monetaria destaca que el moderado crecimiento refleja la “resiliencia” de la economía hondureña, “pese a un contexto internacional menos favorable, caracterizado por una desaceleración del comercio mundial y los problemas en las cadenas de suministro global”.
Cuatro sectores sostienen crecimiento
Sólo cuatro sectores económico muestran aumento. Desde el enfoque de la oferta, las mayores contribuciones al PIBT corresponden a la Intermediación Financiera; Industria Manufacturera y Electricidad; aunado al dinamismo en la recaudación de Impuestos.
La manufactura aumentó 2,8%, reflejando la mayor contribución al PIBT dado el impulso en la fabricación de productos textiles y maquinaria y equipo (arneses), ante el incremento en la demanda externa; y, fabricación de sustancias y productos químicos, utilizados como insumo en la industria maquiladora.
No obstante, se observa caída en el procesamiento de otros productos alimenticios (carnes, productos de la pesca, aceites y grasas, productos de molinería, azúcar y café), en vista de los menores rendimientos agrícolas.
La intermediación financiera, seguros y fondos de pensiones creció 2,5%, explicado por el alza en el
margen financiero, como efecto del dinamismo del crédito al sector privado, que ha favorecido los ingresos
por intereses sobre préstamos fiduciarios, hipotecarios y por tarjetas de crédito. Además del aumento en los ingresos por comisiones principalmente sobre el uso de tarjetas de crédito y prestación del servicio de giros y transferencias.
Electricidad y Distribución de Agua, aumentó 6,5%, efecto de la mayor generación de energía con fuente hídrica y térmica, ante la creciente demanda de las industrias y de los hogares. Y los impuestos netos de subvenciones registraron tasa de variación positiva de 1,9%, explicado por el dinamismo de la actividad económica durante el II trimestre.
Resalta la recaudación de impuestos sobre las importaciones -básicamente maquinarias para usos generales y fardos de ropa usada- y sobre los productos, combustibles (gasolina), bebidas alcohólicas y maquinarias para usos generales y equipo de transporte. Por el contrario, los impuestos al valor agregado (tipo IVA/sobre ventas) disminuyeron.
Desde el enfoque del gasto, el impulso proviene de la mayor demanda externa, así como, en el Gasto de
Consumo Final privado y público; en tanto, la Formación Bruta de Capital se vio favorecida por el “incremento” en la inversión privada y pública, pese a una desacumulación de inventarios y más importaciones que aportaron negativamente al PIB.
