La agencia de medición de riesgo Fitch Ratings informó que rebajó la calificación de incumplimiento de emisor en moneda extranjera a largo plazo de El Salvador de “CCC” a “CC”, y señaló que la situación de liquidez es “grave” antes del pago de eurobonos de enero de 2023.
Tener una calificación de deuda soberana de categoría “CCC” significa que esta es vulnerable a condiciones adversas y depende de condiciones favorables para cumplir con obligaciones financieras. Con el degradado a categoría “CC”, la calificadora entiende que es esperado que el país caiga en impago.
La agencia de medición indicó que “la rebaja de calificación de El Salvador a CC refleja la opinión de Fitch de que las posiciones de liquidez fiscal y externa ajustadas de El Salvador y el acceso al mercado extremadamente restringido en medio de altas necesidades de financiamiento fiscal y un gran vencimiento de bonos externos de 800 millones de dólares en enero de 2023 hacen que el incumplimiento de algún tipo probable”.
Apuntó que “el gobierno de El Salvador anunció recientemente una recompra voluntaria en efectivo de 360 millones para sus bonos externos de 2023 y 2025 por debajo de la par, lo que probablemente debilitará aún más su ya tensa posición de liquidez”.
Señaló que “la posición externa de El Salvador se ha debilitado en medio de un alto déficit de cuenta corriente y próximas amortizaciones externas” y que prevé “un déficit de cuenta corriente de 2.400 millones dólares en 2022 (7,8 % del PIB) y estima cerca de 400 millones en amortizaciones externas con otros 800 millones con vencimiento en enero de 2023″.
La agencia calificadora agregó que entre los factores que podrían, individual o colectivamente, llevar a una mejora de calificación positiva está el pago completo y oportuno de la amortización de los eurobonos de enero de 2023.
Además de una relajación sostenida de las restricciones de financiamiento a través del progreso en el desbloqueo de fuentes de financiamiento predecibles.
Entre 2023 y 2025 se vencen bonos salvadoreños por 1.200 millones de dólares, de acuerdo con el Registro Estadístico de las Emisiones de Valores de la República de El Salvador de la Superintendencia del Sistema Financiero (SSF).
A petición del Gobierno, el Congreso habilitó el “uso de los derechos especiales de giro”, que se encuentra en el Banco Central de Reserva por 365 millones, y de un préstamo por 200 millones con el Banco Centroamericano de Integración Económica para la compra anticipada de los bonos.
Esta semana se lanzó una recompra de unos $360 millones en bonos. Al respecto, Fitch señala en su comunicado que “el tamaño y el alcance de la transacción no altera materialmente la probabilidad de incumplimiento”.