Con un aporte técnico no reembolsable de 50.000 dólares del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), se realizará un estudio denominado “Creación de una cadena cafetera de valor que sea resiliente para mitigar los efectos de catástrofes climáticas y la pandemia covid-19 en Honduras y Nicaragua”.
Los resultados del estudio permitirán contar con un diagnóstico sobre el impacto de los eventos ciclónicos Eta e Iota, así como los de la pandemia en el sector cafetalero de ambos países, de manera que se pueda formular una propuesta de proyecto por país encaminado a propiciar su resiliencia.
El viceministro de Fomento, Industria y Comercio (MIFIC) de Nicaragua, Jesús Bermúdez, expresó que “Los esfuerzos estarán encaminados a lograr la sostenibilidad y resiliencia de la cadena de valor del café de Nicaragua a mediano y largo plazo, en concordancia con nuestras políticas de desarrollo de tan importante rubro exportador”.
Por su parte el Secretario del Consejo Nacional del Café – CONACAFÉ en Honduras, Nelson Omar Funez Flores, declaró que al contar con información actualizada sobre el impacto climático se pueden tomar “decisiones oportunas e inteligentes en el proceso de reconstrucción para lograr una caficultura resiliente capaz de adaptarse a los nuevos desafíos y de aprovechar las oportunidades futuras”.
El café es uno de los productos de exportación más importantes en la región centroamericana, genera fuertes divisas y un efecto sustancial en el Producto Interno Bruto (PIB) de Honduras y Nicaragua. Además, es la principal fuente de ingreso de unos 35,000 productores nicaragüenses y más de 140,000 hondureños.