Tal como se esperaba, el Directorio del Banco Central de Honduras (BCH) decidió aumentar en 25 puntos (0.25%), la Tasa de Política Monetaria (TPM) y llegar a 5,75% con lo que se espera un aumento en los intereses que cobra el sector bancario.
La tasa de política monetaria es una referencia para el resto de rendimientos del sistema bancario lo que encarece el costo del dinero, en un intento del BCH de controlar la inflación.
Según la Comisión de Operaciones de Mercado Abierto (COMA), el aumento fue presionado por el bajo precio del café y el alza de la tasa de referencia en los Estados Unidos (Reserva Federal).
El análisis incluyó el precio del petróleo, que reportó bajas en diciembre y el comienzo del año, pero para el BCH es un mercado “volátil”.
“Los precios internacionales del petróleo WTI (West Texas Intermediate) continúan presentando alta volatilidad, mientras que los precios del café presentan una trayectoria hacia la baja”, argumenta el informe de COMA.
En el ámbito interno, se destaca que la actividad económica, medida a través de la serie original del Índice Mensual de la Actividad Económica (IMAE), ha mostrado mayor dinamismo a partir de abril de 2018, registrando a octubre recién pasado un crecimiento de 3,7%.
Sin embargo, la evolución negativa del comercio (más importaciones y menos exportaciones) durante 2018 incidió en un aumento del déficit en cuenta corriente de la balanza de pagos.
“Con lo que la acumulación de reservas internacionales al cierre de 2018 es menor en comparación a 2017”, dice el BCH.
Esto es contradictorio, ya que “el saldo de reservas permite una cobertura de 5.11 meses de importaciones de bienes y servicios”, levemente mayor a lo registrado en 2017.
En diciembre de 2017 las reservas brutas sumaron 5.087 millones de dólares y en diciembre anterior 5.084 millones. Las reservas netas fueron de 4.785 millones en 2017 y subió a 4.791 millones en 2018.
Inflación por energía y gasolinas
La inflación en 2018 se sitúa en 4,22% debido en gran parte “por el alza en las tarifas de energía eléctrica y transporte, así como por la volatilidad en el precio internacional de los combustibles”.
Asimismo, la inflación subyacente sigue mostrando una tendencia al alza debido, en parte, al efecto indirecto del ajuste en las tarifas de energía eléctrica.
Por lo anterior, “los agentes económicos han adaptado al alza sus expectativas de inflación para 12 y 24 meses”, ubicándolas en una tasa cercana al límite superior del rango de tolerancia establecido por el BCH (4.0% ± 1.0 punto porcentual).
En este contexto, los pronósticos de mediano plazo indican que “la trayectoria de la inflación, sin tomar medidas de política monetaria, se mantendría por encima del rango de tolerancia durante 2019 y 2020”.
Es por ello que al evaluar la situación económica y el balance de riesgos, el BCH como medida precautoria decidió aumentar la Tasa de Política Monetaria en 25 puntos básicos, estableciéndola en 5.75% a partir del 7 de enero de 2019.
Con ello, las tasas de interés de las ventanillas del BCH para la gestión de liquidez (dinero) de corto plazo serían 0.50% para la Facilidad Permanente de Inversión, 6.75% para la Facilidad Permanente de Crédito y 7.50% para los Reportos (acuerdos de recompra).