La petrolera estatal saudí Aramco, logró un beneficio neto de $6.600 millones en el segundo trimestre de 2020, lo que supone una caída de casi 73% con respecto al mismo periodo del año previo, cuando obtuvo unos $24.700 millones.
En el primer semestre del año, el gigante petrolero logró un beneficio neto de $23.200 millones, un 49,5 % menos que los $46.900 millones que logró en los primeros seis meses de 2019, informó este domingo la compañía en un comunicado.
“Los fuertes vientos en contra por la caída de la demanda y los bajos precios del petróleo se reflejan en nuestros resultados del secundo trimestre”, dijo su presidente, Amin Nasser.
El flujo de caja de las actividades de explotación se situó en los $12.300 millones en el segundo trimestre y en los $34.800 millones en los primeros seis meses del año, mientras que el flujo de caja libre fue de $6.100 millones y de $21.100 millones, respectivamente.
En cuanto a los dividendos pagados a los accionistas, ascendieron a $18.750 millones entre abril y junio, y está previsto asignarles la misma cantidad en el tercer trimestre, siendo siempre los correspondientes por los tres meses previos a su entrega.
Nasser destacó su determinación a la hora de mantener la estrategia de crecimiento y diversificación a largo plazo para Aramco.
“Estamos viendo una recuperación parcial en los mercados energéticos según los países del mundo dan pasos para levantar las restricciones y reiniciar los mercados”, concluyó el también director ejecutivo de la mayor petrolera del mundo.