En lo que va del año 2025, el número de migrantes que han cruzado la selva del Darién en ha caído significativamente, según informes del gobierno de Panamá, hasta el 28 de febrero, se reportaron solo 2.637 migrantes, lo que representa una disminución de 96% en comparación con los 72.294 registrados en el mismo periodo del año anterior.
Las autoridades migratorias panameñas atribuyen este descenso a una serie de medidas implementadas por el gobierno panameño y a factores internacionales. En primer lugar, se destaca la reestructuración de los accesos en la selva del Darién, donde se cerraron varios caminos.
Además, la temporada de lluvias y las multas por ingresar de manera irregular al país también han contribuido a la disminución de la migración.
Otro factor importante en la disminución del flujo migratorio ha sido la llegada de nuevas políticas migratorias en Estados Unidos, particularmente desde la toma de posesión de Donald Trump. Las restricciones impuestas por el gobierno estadounidense han disuadido a muchos migrantes de continuar su ruta hacia el norte.
El gobierno de Estados Unidos implementó un nuevo requisito de registro para extranjeros que permanezcan en el país por más de 30 días, que entró en vigor el 25 de febrero de 2025. La medida, anunciada por la Casa Blanca y el Departamento de Seguridad Nacional, DHS, tiene como objetivo mejorar el control migratorio y supervisar a quienes ingresan de manera irregular.
Las personas afectadas, mayores de 13 años, que no se registren podrían enfrentar multas de hasta US$5.000 y penas de prisión de hasta seis meses.
Según el Departamento de Seguridad Interior, no inscribirse en el registro será considerado un delito, lo que implica una criminalización de la inmigración irregular, pues hasta ahora se trataba solo de una infracción administrativa. Tricia McLaughlin, vocera del DHS, destacó que la medida es crucial para conocer quién se encuentra en el país, garantizando así la seguridad tanto del territorio estadounidense como de sus ciudadanos.
En cuanto a la repatriación, el gobierno panameño resaltó que desde la firma de un acuerdo con Estados Unidos en julio de 2024, que establece vuelos de deportación financiados por el país norteamericano, se han realizado más de 40 vuelos de expulsión de migrantes irregulares.
El flujo migratorio en general ha disminuido considerablemente durante los primeros meses de 2025. En los primeros 23 días de enero, la entrada de migrantes irregulares se redujo 93% en comparación con el mismo periodo del año anterior, según cifras de la “Operación Flujo Controlado” del SNM. Esta disminución es reflejo de las políticas implementadas por la administración del presidente José Raúl Mulino y el ministro Frank Ábrego, que han cerrado las trochas clandestinas en la selva del Darién.
El 2024 cerró con 300.549 migrantes que cruzaron el Darién, una disminución de 41% en comparación con los 511.103 migrantes del año anterior, una tendencia que parece continuar en lo que va del 2025.
La implementación de medidas de control y cooperación internacional continúa siendo clave en la gestión migratoria de Panamá, que sigue enfrentando retos en la regulación del tránsito de migrantes en su territorio
