La Casa Blanca presentó un plan de 20 puntos diseñado para poner fin a la guerra entre Israel y Hamás en Gaza, tras una reunión entre el presidente Donald Trump y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
El plan estipula que el conflicto terminaría de inmediato si es aceptado por ambas partes, y que todos los rehenes y los restos de quienes murieron quedaron devueltos en un plazo de 72 horas. El acuerdo también prevé que Israel libere a casi 2.000 prisioneros y establece que no ocupará ni anexará Gaza.
La propuesta alienta a los residentes de Gaza a permanecer en el lugar, promete la reanudación inmediata de la ayuda y señala que se convocará a un “panel de expertos” para “reconstruir y dinamizar” la zona devastada por la guerra con proyectos de desarrollo económico.
El plan exige que Hamás acepte no tener ningún rol directo ni indirecto en el gobierno de Gaza, y menciona un futuro en el que las condiciones para un Estado palestino “puedan finalmente estar dadas” si se implementa el acuerdo.
No está claro si Hamás aceptará esos términos, aun cuando la guerra se acerca a su segundo aniversario. El grupo militante, que desató el conflicto con el ataque del 7 de octubre de 2023 contra Israel, dijo antes del encuentro entre Trump y Netanyahu que aún no había visto el plan y que necesitaría estudiarlo.
Trump compartió su propuesta con líderes de países de mayoría musulmana durante una reunión en Nueva York la semana pasada, al margen de la Asamblea General de la ONU, y ya había insinuado la posibilidad de un progreso inminente.
“Tenemos una verdadera oportunidad de grandeza en Medio Oriente”, dijo Trump en redes sociales el domingo, alimentando la esperanza de un acuerdo e insistiendo en que “lo lograremos”.
Trump y Netanyahu llegaron a la reunión del lunes —la cuarta en lo que va del año— en un momento crucial, con Israel cada vez más aislado en la escena internacional y bajo creciente presión del presidente de EEUU para alcanzar un alto el fuego.
El camino hacia el acuerdo también se facilitó por una llamada telefónica —organizada por Trump— el mismo lunes, en la que Netanyahu expresó sus disculpas al primer ministro de Catar por un ataque en Doha contra altos líderes de Hamás. Catar, mediador clave entre Israel y Hamás y sede de la mayor base militar estadounidense en la región, había reaccionado con indignación al ataque, al igual que otros Estados árabes.
Netanyahu expresó su pesar por la muerte accidental de un militar catarí durante la llamada, según un comunicado de la Casa Blanca.
Conozca los 20 puntos del acuerdo
1. Gaza se convertirá en un territorio libre de terrorismo.
2. La Franja será reconstruida y modernizada en beneficio directo de su población.
3. Si ambas partes aceptan el plan, las hostilidades cesarán de inmediato. Israel retirará sus tropas hasta la línea pactada para facilitar la liberación de rehenes, mientras se congelan todas las operaciones militares, incluidos bombardeos y ataques de artillería, hasta completar la retirada escalonada.
4. Dentro de las 72 horas posteriores a la aceptación israelí, todos los rehenes —tanto vivos como fallecidos— serán devueltos.
5. Tras la devolución de los rehenes, Israel liberará a 250 presos condenados a cadena perpetua y a 1.700 gazatíes capturados después del 7 de octubre de 2023, incluidas mujeres y menores. Por cada rehén fallecido entregado, se liberarán los restos de 15 gazatíes.
6. Los integrantes de Hamás que se comprometan a la paz y depongan sus armas recibirán amnistía. Quienes decidan salir de Gaza podrán hacerlo con garantías de tránsito seguro hacia terceros países.
7. Una vez firmado el acuerdo, entrará ayuda humanitaria a gran escala, que incluirá la reparación de servicios básicos como agua, electricidad, hospitales, panaderías y la remoción de escombros para reabrir vías.
8. La distribución de la ayuda será gestionada exclusivamente por organismos internacionales —ONU, Media Luna Roja y entidades neutrales— sin intervención de ninguna de las partes. El cruce de Rafah funcionará bajo el mismo mecanismo del pacto del 19 de enero de 2025.
9. Gaza será administrada por un comité técnico palestino, independiente de partidos políticos, encargado de la gestión pública. Este comité trabajará bajo la supervisión de la nueva “Junta de la Paz”, liderada por Donald Trump y otros líderes internacionales, que coordinará financiamiento y reformas hasta que la Autoridad Palestina esté lista para retomar el control.
10. Se lanzará un plan económico para la reconstrucción de Gaza, diseñado con la asesoría de expertos que han impulsado exitosos modelos de desarrollo en Medio Oriente. Se atraerán inversiones internacionales con el objetivo de generar empleo y crecimiento sostenido.
11. Se creará una zona económica especial en Gaza con tarifas y condiciones comerciales preferenciales, negociadas con países participantes.
12. Ningún ciudadano será obligado a abandonar el territorio. Quienes quieran emigrar podrán hacerlo con la opción de regresar, pero se alentará a la población a permanecer y aprovechar las nuevas oportunidades de reconstrucción.
13. Hamás y otras facciones quedarán excluidas de cualquier rol en la administración de Gaza. Todas las instalaciones militares y de producción de armas serán destruidas y no podrán reconstruirse. La desmilitarización será supervisada por observadores independientes, con programas internacionales de desarme y reintegración.
14. Los países vecinos garantizarán que Hamás y las facciones cumplan el acuerdo, y que Gaza no represente un riesgo para su población ni para la región.
15. Estados Unidos y sus aliados crearán una Fuerza Internacional de Estabilización (FIS) temporal, que apoyará a la policía palestina local, en coordinación con Egipto y Jordania. Esta fuerza también ayudará a vigilar fronteras y a impedir el contrabando de armas, mientras facilita el comercio y la entrada de ayuda.
16. Israel no anexará ni ocupará Gaza. Sus fuerzas se retirarán gradualmente bajo un cronograma acordado, hasta ceder el control al ente de transición y garantizar que Gaza no represente una amenaza para Israel ni para Egipto.
17. Si Hamás rechaza o retrasa la propuesta, la ayuda humanitaria y demás disposiciones se implementarán únicamente en las zonas consideradas libres de terrorismo.
18. Se abrirá un espacio de diálogo interreligioso para promover tolerancia, convivencia y un cambio cultural en las narrativas de ambas comunidades.
19. El avance en la reconstrucción y las reformas de la Autoridad Palestina podrá crear las condiciones necesarias para un camino realista hacia la autodeterminación y un Estado palestino.
20. Estados Unidos facilitará un proceso político de diálogo entre israelíes y palestinos con el objetivo de sentar las bases de una coexistencia pacífica y próspera.