La actividad manufacturera de Estados Unidos se recuperó un poco más de lo esperado en marzo, según un informe de la industria que asegura que no solo aumento la producción, sino que los nuevos pedidos y las contrataciones.
El Instituto de Gerencia y Abastecimiento (ISM por sus siglas en inglés) dijo que su índice de actividad de fábricas nacionales aumentó a 55,3 desde 54,2 en febrero, que había marcado el nivel más bajo desde noviembre del 2016.
Una lectura por encima de 50 indica una expansión en el sector manufacturero y una medición por debajo de ese umbral apunta a una contracción.
El índice de empleo subió a 57,5 desde 52,3 un mes antes. Las expectativas arrojaban una lectura de 52,4.
El índice de nuevos pedidos subió a 57,4 desde 55,5 en febrero. El índice de precios pagados aumentó a 54,3, lo que indica que los precios que los productores están pagando por los materiales aumentaron por primera vez desde diciembre.
La producción también repuntó, con el índice ubicándose en 55,8 desde 54,8 el mes anterior.