Como una opción para reducir el daño ambiental que causan los automotores y el crecimiento del parque vehicular en el país y la compra de combustibles, se presentó en el Congreso Nacional una iniciativa para promover la compra de automotores híbridos y eléctricos.
El diputado Mario Noé Villafranca, hizo la propuesta formal señalando que la primera medida sería la exoneración del pago de impuestos para la compra de estos automotores y que los dueños solo paguen la matrícula anual.
“La propuesta tiene tres razones importantes, la primera es el tema del cambio climático, la aprobación de la Comisión Marco de las Naciones Unidas y el hecho de la emisión de gases de efecto invernadero, que obviamente, provoca alteraciones, los daños a la salud y una menor compra de combustibles”, explicó.
Con esa intención, se ha analizado la presentación de un anteproyecto de Ley que “exonera del Impuesto Sobre Venta, de pago de impuestos y tasas de importación e introducción y del impuesto selectivo al consumo de vehículos híbridos y vehículos totalmente eléctricos”.
La intención de esto, agregó, es permitir la introducción y la comercialización para poder hacer un menor consumo de combustibles y obviamente, la parte importante de colaboración al medio ambiente y reducir los daños que puede provocar a la salud.
Autos eléctricos en alza, pero caros
A criterio de Villafranca, vicepresidente del Congreso, Honduras debe encaminarse en el rumbo de desarrollo industrial y en el sector automotriz, el uso de autos eléctricos va en aumento.
“Tenemos que ir formando las bases para el desarrollo de este y otros mercados que vaya acorde con el siglo que estamos vivienda”, estimó.
Y es que parece que el futuro está en estos vehículos movidos sin necesidad de gasolina o gasóleo. Los expertos destacan el ahorro energético y mayor eficiencia en los motores.
Esto desarrollaría el sistema de estaciones de servicios para recarga de autos que requerirá una nueva reglamentación en el sector automotriz.
Se estima que el rendimiento de los vehículos eléctricos frente a los vehículos térmicos es de un 29 frente a un 20 por ciento. Pero el precio de los automotores se triplica, lo que explicaría la necesidad de exonerarlos del pago de impuestos.