Después de meses de bonanza de hasta 250 dólares por quintal, el precio del café hoy no supera los 165 dólares en el mercado internacional y comienza a golpear la producción nacional que tiene problemas para encontrar empleados de corte del grano.
Entre enero y diciembre de 2022, los precios internacionales del café han presentado una baja del 27%, unos 60 dólares. Ayer, el quintal oro cerró en $163.42, en la Bolsa de Nueva York, que es el precio de referencia para Honduras. En enero, su precio fue de $223.30.
Según el Instituto Hondureño del Café (Ihcafé), la caída ha sido mayor en los primeros meses de la nueva cosecha, que comenzó en octubre, y el volumen de la actividad es limitado actualmente, además que los últimos datos comerciales de los países exportadores han generado cierta volatilidad en los precios.
Otro factor que incide en los nuevos precios es la inflación global que es de casi doble dígito.
En Honduras, el precio promedio de exportación por saco de 46kg el año pasado fue de $236.70 comparado con el precio promedio a la misma fecha de la cosecha 2020-2021 de $152.13 existe un incremento del 56%, informó el Ihcafé.
Los precios actuales son menores a los del 2021. Según los analistas, el precio dependerá de lo que suceda con la parte macroeconómica a nivel mundial, la cosecha en Brasil y con la demanda del aromático.
La demanda crece año con año un 3%, según datos de la Organización Internacional del Café (OIC). La directora de la OIC, Vanusia Nogueira, dijo que los países productores deben revisar los procesos en la cadena de valor y estar abiertos al cambio para lograr una sostenibilidad económica del sector.
A pesar de los bajos precios, Pedro Mendoza, presidente del Ihcafé, dice que se mantiene el pronóstico de exportación de la actual cosecha (2022-2023) de “unos 7.2 millones de quintales y eso vendría a generar como 1.500 millones de dólares en divisas para nuestro país. Nosotros ahorita ocupamos el quinto lugar (mundial) en producción, pero si no nos fortalecemos, si no cuidamos nuestras áreas productivas, si no las fortalecemos o fertilizamos, esto se puede venir a la baja”.
Recordó que el país venía de exportar 10 millones de quintales, antes de la pandemia, y en la cosecha anterior que cerró en septiembre se cerró en 6.2 millones de quintales, favorecidos entonces por los altos precios que dejaron 1.450 millones de dólares en exportaciones.