El barril petróleo WTI, de referencia para Honduras, abre este lunes en 85,55 dólares el barril, una leve baja del cierre del viernes pasado cuando alcanzó los 86.06 dólares, su máximo anual en este año y el máximo en 10 meses.
Con la última subida, el precio del petróleo WTI en 2023 logró ganar un +6,89%, 5,55 dólares.
Según encuestas realizadas por la Administración de Información de Energía estadounidense, el apetito por el petróleo en Estados Unidos se ha mantenido firme, con un descenso de los inventarios comerciales en 5 de las últimas 6 semanas.
Los mercados esperan ampliamente que Arabia Saudita prorrogue hasta octubre 2023 el recorte voluntario de la producción de 1 millón de barriles diarios (bpd), prolongando así la reducción de la oferta diseñada por la OPEP+ para sostener los precios.
El viceprimer ministro, Alexander Novak, dijo que Rusia ya ha acordado con sus socios de la OPEP+ recortar las exportaciones de crudo el mes que viene.
La OPEP como la Agencia Internacional de la Energía confían en que China, el mayor importador de crudo del mundo, apuntale la demanda durante el resto de 2023, pero la lenta recuperación de su economía tiene preocupados a los inversores.
Tamas Varga del corredor petrolero PVM, dijo: “El resto del 2023 promete traer escasez de suministro, en parte debido a un consumo global razonablemente saludable y en parte a la determinación saudita de proporcionar un precio mínimo alto. A menos que la economía china experimente una reactivación segura el próximo 2024, el ánimo se deteriorará notablemente”.