Las pérdidas no planificadas de oferta de los miembros Irán y Venezuela podrían efectivamente duplicar la reducción prevista de 800.000 barriles diarios con la que se comprometió el cartel la semana pasada, según la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
Existe un precedente para esto: el colapso de la industria petrolera del país latinoamericano fue lo que aceleró los esfuerzos de la OPEP para eliminar el exceso de oferta en 2017.
Esta vez, las sanciones de Estados Unidos a la nación del Golfo Pérsico podrían ampliar ese efecto.
La producción de la OPEP podría disminuir en 1.4 millones de barriles por día desde los niveles de octubre, a 31.5 millones por día durante el primer trimestre del próximo año, y luego caer a 31.2 millones en el segundo, según el informe mensual del mercado petrolero de la AIE.
La reducción, que según la agencia es más una suposición que un pronóstico, incluye tanto la reducción planificada de la OPEP de 800.000 barriles por día, como las pérdidas involuntarias de 600.000 barriles por día de Irán y Venezuela en el primer trimestre.
Ambos países están exentos de los recortes voluntarios. En el segundo trimestre, la reducción del par será de 900.000 barriles por día, señaló la AIE.
Si las suposiciones de la agencia son correctas, los inventarios globales de petróleo podrían reducirse sustancialmente en el segundo trimestre, un fenómeno que a menudo está acompañado por el alza de los precios.