Honduras se encuentra en la posición 38 global con libre acceso a 133 destinos, dos menos que en enero
Singapur superó a Francia, Alemania, Italia y España para reclamar los derechos de alarde como tener el pasaporte más poderoso del mundo. Los cuatro países europeos, que tradicionalmente eran los mejores, están ahora en segundo lugar junto con Japón.
Tener un pasaporte de Singapur significa conseguir entrada sin visado a un récord de 195 destinos globales, poniendo al estado de la ciudad en la cima en el índice de pasaportes de Henley, que revisó las cifras anuales.
Siete naciones ocupan el tercer lugar por primera vez. Los titulares de pasaportes de Austria, Finlandia, Irlanda, Luxemburgo, Holanda, Corea del Sur y Suecia pueden entrar en 191 plazas sin contratiempos.
El ranking, publicado por la consultora de inmigración Henley & Partners, con sede en Londres, utiliza datos de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo para clasificar 199 pasaportes acceso a 227 destinos de viaje.
En el caso de Honduras se redujo el acceso a 133 naciones (135 países en el informe de enero), pero se subió a la posición 38 global.
La capacidad de viajar sin visado a una amplia gama de destinos ya no es meramente una conveniencia, dijo el director ejecutivo de Henley, Juerg Steffen. Es una poderosa herramienta económica que puede impulsar el crecimiento, fomentar la cooperación internacional y atraer inversión extranjera.
“La tendencia general en las últimas dos décadas ha sido hacia una mayor libertad de viaje, y el promedio mundial de destinos a los que los viajeros pueden acceder sin visado casi se ha duplicado, pasando de 58 en 2006 a 111 en 2024. Sin embargo, la brecha de movilidad global entre los que están en la parte superior e inferior del índice es ahora más amplia que nunca, y Singapur, que ocupa el primer puesto, puede acceder a un récord de 169 destinos más sin visado que Afganistán”, declaró.
Según la IATA, las aerolíneas conectarán a casi 5.000 millones de personas en más de 22.000 rutas y 39 millones de vuelos en 2024, y la carga aérea transportada alcanzará los 62 millones de toneladas, lo que facilitará un asombroso comercio de 8,3 billones de dólares.