La oficina de derechos humanos de Naciones Unidas afirmó el martes que el asedio de Israel a Gaza y su orden de evacuación del norte del enclave podrían equivaler a un traslado forzoso de civiles e infringir el derecho internacional.
En declaraciones a la prensa en Ginebra, Ravina Shamdasani, portavoz de la oficina de derechos humanos de la ONU, dijo que Israel no parecía haber hecho ningún esfuerzo para garantizar que los civiles evacuados temporalmente en Gaza dispusieran de un alojamiento adecuado, así como de condiciones satisfactorias de higiene, salud, seguridad y nutrición.
“Nos preocupa que esta orden, combinada con la imposición de un asedio total a Gaza, no pueda considerarse una evacuación temporal legal y, por tanto, equivalga a un traslado forzoso de civiles en contravención del derecho internacional”, afirmó.
“Los que consiguieron cumplir la orden de evacuación de las autoridades israelíes se encuentran ahora atrapados en el sur de la Franja de Gaza, en condiciones precarias de alojamiento, con provisiones de alimentos que se agotan rápidamente y con escaso o nulo acceso a agua potable, saneamiento, medicamentos y otras necesidades básicas”.
El término “traslado forzoso” describe la reubicación forzosa de poblaciones civiles y es un crimen contra la humanidad punible por la Corte Penal Internacional (CPI).
Por su parte, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) dijo que sus suministros de alimentos en Gaza se estaban agotando, pero que estaba almacenando suministros en la cercana ciudad egipcia de Al-Arish.
Abeer Etefa, responsable regional de comunicación del PMA para Oriente Medio y el Norte de África, dijo que esperaban “pasar tan pronto como se permita el acceso a la frontera”.
“Pedimos un acceso sin obstáculos, un paso seguro para los suministros humanitarios que Gaza necesita desesperadamente”, dijo.
Los camiones con suministros se dirigieron hacia el paso fronterizo de Rafah, en Egipto, único punto de acceso al enclave fuera del control de Israel, aunque no es seguro que puedan entrar.
Se espera que las reservas de combustible de todos los hospitales de Gaza duren sólo 24 horas más, según la agencia palestina de la ONU Unrwa.
“El cierre de los generadores de reserva pondría en grave peligro la vida de miles de pacientes”, declaró.