“Una transición verde efectiva en América Latina y el Caribe (ALC) podría generar potencialmente un 10,5% más de nuevos empleos para 2030”, dice el informe Perspectivas económicas de América Latina (LEO) 2022: Hacia una transición verde y justa.
Según la 15 edición del informe, la desaceleración económica de este año, un contexto internacional inestable golpeado por la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania, el aumento de las presiones inflacionarias y la reducción del espacio de política macroeconómica, podría empeorar significativamente las perspectivas económicas a largo plazo y exacerbar las desigualdades en América Latina y el Caribe.
Por ejemplo, se estima que en 2022 los hogares vulnerables en ALC enfrentaron un aumento de precios promedio de 3,6 puntos porcentuales más que el hogar representativo a nivel nacional.
Los impactos ambientales agravan estas dificultades. Trece de los 50 países más afectados por el cambio climático se encuentran en la región de ALC. LEO 2022 argumenta que perseguir una transición verdea través de políticas activas de mitigación y adaptación implementadas de manera sistémica puede hacer que las sociedades de ALC sean más resilientes al cambio climático y promover un mejor desarrollo.
El informe desglosa los beneficios ambientales, sociales y económicos que puede generar una transición verde. Por ejemplo, invertir en tecnologías renovables no solo puede reducir sustancialmente las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), sino que también puede proporcionar una generación de energía de menor costo y reducir la dependencia de productos de combustibles fósiles importados.
La participación de ALC en las emisiones globales de GEI es proporcional a su participación en la población mundial total (8,4%), ligeramente superior a su participación en el producto interno bruto (PIB) total (6,4%), pero inferior a las emisiones per cápita de otras regiones con niveles de desarrollo similares.
Su combinación energética también es más ecológica: los recursos de energía renovable representan el 33% de su suministro total de energía en comparación con el 13% a nivel mundial.
En este contexto, LEO 2022 proporciona una descripción detallada de las acciones políticas sólidas e integrales para promover transiciones justas y verdes en ALC. Se destacan cinco áreas prioritarias:
Transformar aún más la combinación energética de la región alejándola de los combustibles fósiles y avance hacia la descarbonización y la electrificación en todos los sectores, especialmente las industrias pesadas y el transporte, mientras toma medidas para aumentar la eficiencia energética.
Diseñar políticas fiscales que sean sostenibles y compatibles con transiciones verdes justas, eliminando gradualmente los subsidios perjudiciales para el medio ambiente y aprovechando el potencial de los impuestos relacionados con el medio ambiente. Ampliar el desarrollo de instrumentos financieros innovadores, como los canjes de deuda por naturaleza, y movilizar a las instituciones financieras de desarrollo y al sector privado. Es crucial adoptar herramientas regulatorias que incluyan estándares y taxonomías para bonos verdes o vinculados a la sostenibilidad.
Impulsar políticas de desarrollo industrial y productivo para transformar las estructuras económicas de ALC y generar más y mejores empleos, también mediante la adopción de principios de economía circular y el aprovechamiento de la economía azul. Esto requerirá invertir en nuevas tecnologías y habilidades, y volver a capacitar a la fuerza laboral para aprovechar las oportunidades emergentes. También requerirá ampliar las políticas activas del mercado laboral y diseñar sistemas de protección social mejor focalizados para apoyar a los trabajadores afectados negativamente por la transición verde.
Fortalecer los mecanismos institucionales para fomentar el consenso sobre las opciones de política necesarias para avanzar en la transición verde. La agenda verde puede ser la piedra angular de un nuevo contrato social sostenible: el 68% de los ciudadanos de la región ven el cambio climático como una amenaza muy grave para su país en los próximos 20 años, un nivel superior al de otras regiones.
Los objetivos de las Contribuciones Nacionalmente Determinadas deben traducirse en acciones concretas, visibles, implementadas y financiadas en el contexto de estrategias de largo plazo, como los Planes Nacionales de Desarrollo.
Desarrollar y ampliar las alianzas internacionales. Para aprovechar al máximo las nuevas normas y regulaciones verdes internacionales, y gestionar el impacto de las políticas adoptadas en los países socios, por ejemplo, en el comercio, los países de ALC deben mejorar la cooperación con actores clave, incluido el sector privado y las instituciones multilaterales.
El LEO es elaborado conjuntamente por el Centro de Desarrollo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de las Naciones Unidas (ONU-CEPAL), CAF-Banco de Desarrollo de América Latina y el Comisión.