Tal como lo esperaba el mercado, la Reserva Federal mantuvo la tasa de fondos federales en su máximo de 23 años, en el margen de 5,25% a 5,50% por octava reunión consecutiva.
Por ahora se espera que las autoridades den una pista crucial de que podrían reducir los costos de endeudamiento en los próximos meses en medio de señales de enfriamiento de la inflación y una desaceleración del mercado laboral.
En junio, la inflación general anual cayó al 3%, su nivel más bajo desde junio de 2023, mientras que la tasa básica alcanzó un mínimo de más de tres años del 3,3%. La tasa PCE anual también disminuyó a 2,5% desde 2,6%.
La tasa PCE básica, que es el indicador de inflación preferido del banco central, se mantuvo en el 2,6%, muy por debajo de su pico en 2022. Además, la tasa de desempleo se encuentra en un máximo de 2021 del 4,1%, las nóminas se están desacelerando y los despidos están aumentando.
Los principales índices subieron. El Nasdaq Composite, con una fuerte presencia tecnológica, tuvo un mejor desempeño y sumó 2,5%. El S&P 500 y el Dow registraron ganancias menores.
El yen y los rendimientos de los bonos japoneses subieron después de que el Banco de Japón aumentara las tasas de interés y presentara un plan para reducir la compra de bonos.
Los precios del petróleo subieron después de que un líder político de Hamás fuera asesinado en Irán e Israel lanzara un ataque aéreo en Beirut, lo que generó preocupaciones sobre interrupciones del suministro.