Un análisis del banco Barclays afirma que la inflación caerá hasta el 2024 a un nivel del 2%
Se suponía que 2022 sería el año de la pospandemia y de las reaperturas. Pero se convirtió en el año de la guerra, de las crisis de precios de las materias primas y energía, y sobre todo de la inflación. En consecuencia, los bancos centrales del mundo han respondido con un alza generalizada de las tasas de interés. ¿Pero esta inflación continuará en 2023?
Un análisis del banco Barclays afirma que la inflación caerá, pero lentamente, de modo que este año el IPC aumentará 4,6% en promedio a nivel global. “Incluso si los bancos centrales dejan de subir (las tasas de interés) a principios del próximo año, es posible que tengan que subir más más adelante en el año”, señala la entidad.
Por otra parte, un análisis del banco ING señala que la respuesta depende de la región. Para el caso de los EE UU, la empresa indica que “la alta proporción de vivienda y autos usados en la medida de la inflación (más de 40% de la canasta) podría hacer bajar la inflación general más rápido de lo que muchas autoridades esperan actualmente”.
En Europa, la entidad proyecta que los precios del gas seguirán altos hasta el invierno de 2023, por lo que la inflación objetivo de 2% del Banco Central Europeo no llegaría hasta 2024.
“En este contexto de inflación gradualmente decreciente pero estructuralmente más alta, la pregunta clave es qué harán los bancos centrales si la inflación subyacente no vuelve completamente al objetivo en los próximos 12 a 18 meses”, señala el documento.
Las proyecciones de ING indican que el alza de las tasas de interés se estabilizarán en el primer semestre del 2023, y empezarán a bajar en el segundo semestre en el caso de la Reserva Federal.
“La Reserva Federal cree que en 2023 puede tener una ventana para controlar la inflación manteniendo las tasas de política más altas por más tiempo. El crecimiento económico y las valoraciones de activos pueden ser daños colaterales, pero valen la pena. Desde el punto de vista de la Fed, una acción agresiva ahora puede significar eliminar la necesidad de actuar más agresivamente más adelante, lo que crearía un daño mayor”, apunta Jim Caron, Asesor Senior de Morgan Stanley..