El país está en la quinta posición en Latinoamérica
El grupo The European House – Ambrosetti presentó la edición 2020 del Índice de Atracción Global (GAI, por sus siglas en inglés), que mide y compara el potencial, en términos de inversión y desarrollo productivo, de 144 economías del mundo.
La medición, que considera cuatro dimensiones (apertura, innovación, talento y eficiencia), otorga 100 puntos a la mejor y establece qué tan alejados quedaron los otros países del líder.
Honduras, considerada de atracción muy baja, ocupó la casilla 120, tras obtener apenas un puntaje de 11.13, lo que representa una diferencia abismal con Alemania (88.87 puntos), líder del ranking.
“El atractivo de un país es, de hecho, un concepto que depende de una pluralidad de factores económicos, pero también sociales, culturales, de innovación, de eficiencia, de capacidad de apertura y diálogo con países extranjeros y del talento de cada uno”, explica el informe.
Alemania ha consolidado su posición como número 1 en el GAI, tanto en términos de ranking como de puntuación. Los Estados Unidos, que hasta 2017 era el líder, pasó al segundo puesto, pero está muy cerca del primero, ya que suma 99,61 puntos. Los demás, en cambio, están bastante más lejos. Por ejemplo, el tercero es Singapur, con una puntuación de 90,51.
Solo hay seis economías más catalogadas como de “Atracción Alta” por los autores del informe: Japón (90.06), Reino Unido (89.17), Hong Kong (87.89), China (82.13), Canadá (80.75) y Corea del Sur (80.06).
El top ten del ranking lo completan los Países Bajos, que por tener 79.86 puntos –más de 20 por debajo de Alemania–, pasan a la categoría siguiente: “Atracción Buena”.
Latinoamérica lejos
Los países latinoamericanos en general resultan poco atractivos. Apenas tres de los 19 evaluados están entre los 50 más atractivos del mundo: Brasil, que ocupa el puesto 41, con 44.74 puntos; México, que está 43, con 43.46 puntos; y Chile, que está 46, con una puntuación de 39.80.
Son los únicos tres de la región que llegan a ser considerados como de “Atracción Media”. Todos los demás son de “Atracción Baja”, lo que significa que pocas empresas están interesadas en invertir su dinero en ellos.
Pero la región no es la única en problemas. El informe destaca que la Unión Europea (UE) está experimentando un proceso de disminución de su atractivo. En los últimos cinco años, el 75% de sus miembros han estado disminuyendo o se han mantenido estables en el ranking, y en la última década, el porcentaje europeo de la torta mundial de Inversión Extranjera Directa ha disminuido del 43,7% al 30,7 por ciento.
El GAI intenta captar los posibles efectos de la pandemia de COVID-19 en el rediseño del mapa de atracción, mientras continúa la incertidumbre sobre la capacidad de recuperación a mediano y largo plazo.
A corto plazo, los autores creen que hay que evaluar el crecimiento de las desigualdades sociales, el aumento del desempleo y el impacto de la crisis en las finanzas públicas y en los salarios.
Estas dificultades reducirán el atractivo de las economías más vulnerables en particular, pero también representan un gran desafío para las más sólidas.
Sin embargo, los investigadores advierten que la pandemia podría tener algunas consecuencias positivas en ciertos ámbitos del desarrollo y la competitividad.
Las cuarentenas tuvieron tres efectos que no dejan de ser interesantes: fomentaron el uso de herramientas digitales, contribuyeron a reducir las emisiones de gases contaminantes y bajaron el consumo de materias primas.
Claro, son tendencias que se revertirán si no están acompañadas de reformas transformadoras y sostenidas en el tiempo. Pero este puede ser el mejor momento para avanzar en esa dirección.