El gigante de Internet, Google, fue demandado en una acción colectiva que acusa a la compañía de invadir ilegalmente la privacidad de millones de usuarios al rastrear de manera generalizada su uso de Internet a través de navegadores configurados en modo “privado”.
La demanda busca al menos $5.000 millones y acusa a la unidad de Alphabet de recopilar información sobre lo que las personas ven en línea y dónde navegan, a pesar de usar lo que Google llama modo incógnito.
La compañía no hizo comentarios de inmediato.
La demanda sostiene que Google recopila subrepticiamente datos a través de Google Analytics, Google Ad Manager y otras aplicaciones y complementos de sitios web, incluidas algunas para teléfonos inteligentes, independientemente de si los usuarios hacen clic en anuncios compatibles con Google.
Esto ayuda a la compañía a conocer detalles sobre los amigos de los usuarios, sus pasatiempos, sus comidas favoritas, sus hábitos de compra e incluso las “cosas más íntimas y potencialmente embarazosas” que buscan en línea, según la denuncia.
Google “no puede continuar participando en la recopilación de datos encubiertos y no autorizados de prácticamente todos los estadounidenses con una computadora o teléfono”, sostiene la demanda.
Si bien los usuarios pueden ver la navegación privada como un refugio, investigadores de seguridad informática han expresado durante mucho tiempo preocupación de que Google y sus rivales puedan rastrear las identidades de las personas en diferentes modos de navegación.
La demanda incluiría a “millones” de usuarios de Google que desde el 1 de junio de 2016 navegaron por Internet en modo “privado”.