A pesar del aumento de los ingresos, las prioridades del gasto del Gobierno difieren del discurso público de mayores inversiones públicas y sociales.
Según datos de la Secretaría de Finanzas, al 24 de julio, mientras la inversión pública ejecutada llega a “1.192 millones de lempiras, el 11,9% de los 9.715 millones de lempiras “revisados a la baja a junio“, ya se pagó un servicio de deuda por 36.933 millones de lempiras, el 60% del total presupuestado (60.660 millones).
También se ejecutó el 48,8% de la partida de Servicios Profesionales, 40.335 milones de lempiras de 82.560 millones aprobados, siendo el pago de sueldos y salarios del gobierno central, el principal destino (27.414 millones de lempiras al primer semestre).
Finanzas redujo la partida de Inversión Pública, que fue aprobada originalmente con más de 23.000 millones de lempiras.
Hay que destacar que Finanzas contempla un Presupuesto General con un monto menor al aprobado por el Congreso Nacional, lo que hace difícil un correcto análisis de las cifras.
Según la reforma presupuestaria, el Presupuesto General 2022 se incrementó a más de 360.500 millones de lempiras, pero SEFIN publica un monto de “324.390 millones de lempiras”, en la ejecución del Presupuesto de Egresos por Grupo, donde señala que llevan una ejecución del 42% (137.620 millones), a la fecha.
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Según datos de la plataforma de Inteligencia de Negocios de la Secretaría de Finanzas (BiSefin), también hay baja ejecución en las partidas de activos financieros con un 25% y la de Materiales y Suministros del 20% del presupuesto vigente.