La coyuntura internacional por la pandemia del coronavirus, la reactivación de Estados Unidos y el cumplimiento en el pago de la deuda externa, permitirían al Gobierno aprobar la cuarta revisión del Programa Stand By, firmado con el Fondo Monetario Internacional (FMI), de acuerdo a la opinión de los analistas económicos.
Con una semana de reuniones virtuales, una misión técnica del FMI revisa las cifras macroeconómicas del país de 2020 y las perspectivas para este año. Los indicadores están dentro de los parámetros de aprobación del FMI, con excepción de las finanzas de la ENEE que siguen en “rojo”.
Para el ex presidente del Colegio de Economistas de Honduras, Martín Barahona, la misión del FMI mantendrá su “flexibilidad” en sus análisis y aprobará los desembolsos prometidos para ayudar a la estabilidad financiera frente a los efectos que deja la pandemia.
“La misión del FMI en realidad viene a insistir en los mismos temas que están en la carta de intenciones y el memorándum técnico de políticas económicas y financieras que firmó el Gobierno, incluyendo la aplicación de la Ley General de Energía para recuperar a la ENEE, vía tarifas”, declaró.
“El FMI está siendo bastante flexible en varios temas incluyendo la apreciación del lempira frente al dólar, insistirá con el tema de la ENEE y es posible que felicite al gobierno por el control del déficit fiscal. El problema es que las políticas económicas no resuelven los problemas de pobreza que tiene el país”, opinó el economista.
Para el ex presidente del BCIE, Federico Álvarez, el FMI está impulsando la reactivación económica y difícilmente exigirá más a los países en las condiciones actuales negativas que deja la pandemia.
“Es el Gobierno el que debe dar pasos para reducir el endeudamiento externo, reactivar la construcción para generar empleo y cumplir con leyes aprobadas como la del sector eléctrico”, opina Álvarez.
Inflación y reactivación de EE UU
Aunque los analistas advierten los riesgo del endeudamiento externo creciente, que reduce el margen de inversión, el presidente del BCH, Wilfredo Cerrato, señala que se han presentado las cifras fiscales y monetarias, pero “el tema principal es el control de la inflación, me siento contento que en estimaciones de nuestro equipo técnico con las estimaciones de los técnicos del FMI son casi iguales. El comportamiento de la inflación estimada para este año, donde no vemos eventos extraordinarios que hagan que la inflación vaya a estar fuera del rango meta de 3 a 5%”.
El funcionario destacó que la cifra de crecimiento económica del FMI es mayor a la del BCH. La confianza es por la reactivación de la economía estadounidense, el principal socio que tiene Honduras.
“Esa es una variable a considerar que impacta positivamente en la economía a través de demandas de bienes y servicios del mercado estadounidense sobre los productores de Honduras y también la recepción de remesas que están creciendo bastante alto en comparación a lo que teníamos estimado”, agregó.
La vacunación es una preocupación planteada con la misión del FMI, así como el efecto negativo de las tormentas Eta e Iota de 1,5% para este año, según la estimación del BCH.
La lenta recuperación del crédito es reconocida por la Autoridad Monetaria, pero eso no afectaría la evaluación final del FMI.