Un fuerte sismo de magnitud 5.6 se registró la noche de este domingo en Conchagua a unos siete kilómetros al suroeste de La Unión, El Salvador.
El temblor tuvo una profundidad muy superficial de 15.4 km y se sintió en una gran parte de la región en especial en Honduras y Nicaragua. La poca profundidad del sismo hizo que se sintiera más fuerte cerca del epicentro que lo que sería un terremoto más profundo de magnitud similar.
No se esperan daños o impactos significativos debido a este temblor y no se emitió ninguna alerta en particular, aunque Copeco reportó el fenómeno que se sintió desde el sur al centro del país.
El Salvador fue sacudido cerca de San Miguel, informó el Servicio Geológico Colombiano (SGC). La magnitud exacta, el epicentro y la profundidad del terremoto podrían revisarse en las próximas horas o minutos, a medida que los sismólogos revisen los datos y refinen sus cálculos, o cuando otras agencias emitan su informe.
Posteriormente, el Centro Sismológico Europeo-Mediterráneo (EMSC) emitió un segundo informe que lo calificó como un terremoto de magnitud 5,4. Una tercera agencia, el Centro Alemán de Investigación de Geociencias (GFZ), informó del mismo terremoto con una magnitud de 5,4.
Según los datos sísmicos preliminares, el sismo probablemente fue sentido por muchas personas en la zona del epicentro. No debió causar daños importantes, aparte de objetos que caían de estanterías, ventanas rotas, etc.
En Sensuntepeque (población 20,400) ubicado a 20 km del epicentro, Santiago de María (población 15,000) a 30 km, San Rafael Oriente (población 19,100) a 44 km, San Miguel (población 161,900) a 45 km y San Martín (población 39,400) a 46 km, el sismo debió sentirse como un temblor leve.