La calificadora internacional de riesgo, Fitch Ratings informó que ha dejado de clasificar las finanzas y emisiones de la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC), pero afirmó las notas de cierre del 2024 en ‘B’ las calificaciones internacionales de riesgo emisor (IDR; issuer default rating) de largo plazo y las de corto plazo en ‘B’.
El perfil crediticio individual es evaluado en ‘b+’. La Perspectiva de las calificaciones de largo plazo es Estable.
“Fitch ha decidido, por razones comerciales propias, retirar las calificaciones en escala nacional de AMDC Tegucigalpa. A partir de esta fecha, Fitch no proveerá servicios de seguimiento a las calificaciones en escala nacional del emisor”, informó Fitch.
El perfil de la Alcaldía capitalina
En su última evaluación, Fitch se refirió al perfil de la AMDC en Tegucigalpa, que es la capital de Honduras. Tiene una población de 1.2 millones de habitantes. En 2023 su PIB per cápita era USD8,300, superior al nacional (estimación 2022: USD3,528), aunque bajo en términos internacionales.
Su estructura económica es diversa y poco concentrada; está sustentada en las inversiones pública y privada que respaldan la autonomía presupuestaria del distrito central. Fitch califica a la alcaldía como una entidad tipo B debido a que cubre el servicio de deuda con su flujo anual de efectivo.
En agosto señalaba que un “Perfil de Riesgo” –‘Más Débil’. El perfil de riesgo en ‘Más Débil’ considera la combinación de tres factores evaluados en ‘Rango Medio’ y tres en ‘Más Débil’, así como un puntaje implícito en la categoría de ‘b’ dado el entorno operativo (EO). Este puntaje refleja la percepción de Fitch para Honduras del entorno económico, desarrollo del mercado financiero, régimen de bancarrota, políticas de reporteo y endeudamiento, así como control y monitoreo.
El perfil ‘Más Débil’ refleja un riesgo alto, en opinión de Fitch, de que el flujo de efectivo disponible para servir el servicio de deuda pueda debilitarse más allá de lo esperado en el horizonte de proyección (2024 a 2028). También incorpora el marco institucional nacional débil en el cual operan los gobiernos locales y regionales (GLR) en Honduras.
Al cierre de 2023, la deuda de largo plazo de la entidad era de HNL6,100 millones, la cual incorpora HNL350 millones de un crédito bancario de corto plazo. La totalidad de la deuda es con la banca comercial y el costo promedio fue de 11.8%. El pago de esta deuda se realiza a través de un fideicomiso, mecanismo que brinda certeza y predictibilidad a su pago. Al cierre de julio de 2024, la deuda directa era de HNL6,350 millones, con un crédito bancario de corto plazo por HNL600 millones.
En octubre del año pasado, el Congreso Nacional autorizó la AMDC a renegociar hasta L5.000 millones de deuda.