El Gobierno declaró este lunes “estado de emergencia” en cuatro departamentos del país, tres de ellos fronterizos con El Salvador, debido al temporal lluvioso que, en dos semanas, ha dejado al menos once personas muertas, más de 10.000 afectadas y daños materiales.
El “estado de emergencia” regirá durante 45 días, según la ordenanza publicada en el diario oficial La Gaceta.
Además, en Tegucigalpa los empleados del sector público retomen el teletrabajo, atendiendo una solicitud del alcalde de la capital Jorge Aldana, orientada a resolver el problema del tráfico en la ciudad, en la que circulan alrededor de un millón de vehículos, incluidas motocicletas.
Los departamentos en “estado de emergencia” son La Paz, Intibucá y Lempira, en el oeste del país. Se suma Francisco Morazán, centro, donde se localiza Tegucigalpa, una ciudad altamente vulnerable que está cruzada por fallas geológicas, ríos y quebradas.
“El pronóstico de lluvias para el mes de octubre y en forma precisa, en los próximos días, anuncia impactos y efectos graves y moderados en la población y sus bienes, en diferentes áreas y departamentos mencionados”, subraya el diario oficial.
Añade que el paso de disturbios tropicales ya ha causado daños y saturación de suelos, por lo que se debe actuar “con responsabilidad y la finalidad de atender a la población y prevenir mayores daños a las personas y sus bienes y establecer prioridades, ejecutar labores de salvamento, rescate y reconstrucción”.
Las jornadas de teletrabajo en el sector público, en Tegucigalpa, exceptúa “a las instituciones que tienen que atender la emergencia por lluvias de forma presencial”, y serán suspendidas “cuando la Alcaldía ejecute las acciones previstas en su plan de emergencia”, subraya la ordenanza.
El objetivo del teletrabajo en la capital es para que sus autoridades desarrollen “el plan anunciado de emergencia vial (la semana pasada), ordenamiento urbanístico y ambiental”.
Muerte y destrucción
Al menos once personas han fallecido y 10.491 han sido afectadas por las intensas lluvias que azotan a Honduras desde el pasado 29 de septiembre, informó el domingo e Sistema Nacional de Gestión de Riesgos y Contingencias (Copeco).
El mal tiempo también ha dejado 1.996 personas damnificadas, 347 evacuadas y una desaparecida, además de 32 rescatadas y 65 comunidades incomunicadas, indicó el organismo de protección civil en un comunicado.
A raíz del temporal, derivado de fenómenos en el Caribe y el Pacífico, de los 18 departamentos del país centroamericano cuatro permanecen en alerta roja (evacuación inmediata), cinco en amarilla (evacuación preventiva) y cinco en alerta verde (preventiva).