El gerente de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), Jesús Mejía, señaló que en unos 15 días estará listo un “apalancamiento” con el sector bancario pata hacer frente a la deuda que arrastran con los proveedores.
De acuerdo con el departamento contable de la estatal de energía la deuda con proveedores suma 12.496 millones de lempiras al 31 de octubre.
Mejía señaló que el apalancamiento se expuso ante la Asociación Hondureña de Instituciones Bancarias (Ahiba) para buscar una oferta que fuera competitiva, y evitar ir directamente a un banco.
“Para esto sólo dos bancos han mostrado interés y están pidiendo el aval del Estado. Por eso se propuso a la Ahiba un apalancamiento de 6.500 millones de lempiras”, apuntó.
Con ese monto de crédito quedaríamos ya con la cartera limpia para el año 2018. Tenemos que ver cómo agarramos toda esta deuda y se manda para largo plazo, recuerden que el 2019 se vienen (pagos) unos bonos que fueron adquiridos en el año 2013, y tienen que ser refinanciados para largo plazo.
Jesús Mejía, gerente de la ENEE
Presupuesto insuficiente
“Estamos viendo los diferentes escenarios posibles, estamos viendo los decretos legislativos que tendrían que desarrollarse para las ampliaciones presupuestarias, ya que el presupuesto que se nos aprobó el año pasado, es muy por debajo de lo que se terminó comprando en energía”, cuestionó.
Mejía aseguró que en el presupuesto se hicieron las previsiones desde el año pasado “y tenemos la documentación correspondiente, pero ustedes saben que la Secretaría de Finanzas, pues, tiene su forma de asignar presupuesto, que no es lo que uno solicita, sino que lo que ellos tienen dentro de su plan de país”.
En relación al interés de los nuevos préstamos, señaló que están negociando directamente y evitar que las condiciones las pongan los proveedores con los bancos ya que el interés que se paga es alto actualmente.
Señaló que el acuerdo de reforma a la Ley Energía, permitirá reducir los precios de los contratos y unido a la baja del petróleo, poder empezar el 2019 con menores presiones presupuestarias y evitar retrasos en el pago a los proveedores.
“Esperamos que ya esto sea la última vez que la ENEE tenga que sacar un préstamo”, concluyó.