El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este miércoles con una subida del 0,8%%, hasta 82.10 dólares el barril, tras una reducción en los inventarios de crudo de Estados Unidos la semana pasada y la previsión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) de que este año habrá una sólida demanda de oro negro.
Al término de la jornada en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del WTI para entrega en agosto sumaron 69 centavos de dólar con respecto al cierre de la sesión anterior.
La Administración de Información Energética (AIE) dio a conocer hoy que los inventarios de petróleo en EE UU cayeron en 3.4 millones de barriles la semana pasada y que las existencias de gasolina se redujeron en 2 millones de barriles.
Por su parte, la OPEP informó hoy que prevé un crecimiento de la demanda de crudo en 2.2 millones de barriles diarios para 2024 y un aumento del rendimiento económico mundial hasta el 2,9%.
El analista Tom Essaye señala en su informe Sevens Report que las últimas declaraciones del presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, que reconoció ayer que los altos tipos de interés están afectando al sector de la vivienda, dispararon la preocupación de los operadores por la demanda de crudo.
Los precios del Texas han subido estos últimos días debido, en parte, al temor del mercado por el posible impacto del huracán Beryl en las refinerías de la Costa del Golfo, aunque finalmente la tormenta ha pasado por la zona sin causar daños sustanciales en las infraestructuras.
En otros mercados, los contratos de gas natural para entrega en agosto bajaron a 2,33 dólares por mil pies cúbicos, y los contratos de gasolina con vencimiento el mismo mes descendieron a 2,50 dólares el galón.