El precio del petróleo ha caído este martes a su nivel más bajo en un mes en medio de las preocupaciones del mercado por la débil demanda y ante al aumento de los inventarios de crudo.
El barril Brent, de referencia en Europa, ha bajado un 1,19%, hasta los 81,42 dólares, mientras que el West Texas, de referencia en EEUU, ha perdido un 1,35%, hasta los 77,34 dólares.
“La caída de los precios del petróleo puede verse como una combinación de múltiples factores, incluido el aumento de los inventarios, la débil demanda mundial y la ineficacia de las medidas económicas en China”, explica Antonio Ernesto Di Giacomo, analista de XS.com.
Cabe destacar que el gigante asiático está intentando estimular su economía y para ello ha llevado a cabo un pequeño recorte en los tipos de interés.
“Sin embargo, no ha tenido un impacto significativo en el mercado petrolero. Esto sugiere que el estado actual de la economía china, a pesar de ser un gran consumidor de petróleo, no está ejerciendo la influencia esperada sobre los precios mundiales del crudo. Este comportamiento del mercado se puede atribuir a la percepción de que el recorte de tipos fue insuficiente para impulsar una sólida demanda de petróleo en el país asiático”, añade el experto.
Todo ello, a medida que los inversores “ignoran” el aumento de la tensión en Oriente Medio después de que Israel respondiera al ataque de los hutíes en Yemen cerca del puerto de Al Hudaydah durante el fin de semana, alcanzando instalaciones petroleras.
Si bien el aumento de los inventarios y la débil demanda han desempeñado un papel central, los estrategas advierten que no se puede subestimar la influencia de los acontecimientos geopolíticos y las políticas económicas globales.
En el contexto de las políticas monetarias, la Reserva Federal (Fed) parece dispuesta a mantener sin cambios los tipos de interés en su próxima reunión prevista para finales de julio. No obstante, se está descontado un primer recorte en septiembre. Esta expectativa de estabilidad contribuye a un entorno predecible para los inversores, que ahora no ven ninguna razón para ajustar drásticamente sus posiciones en el mercado petrolero.
“Las perspectivas actuales sugieren que, aunque las decisiones políticas y las tensiones en Oriente Medio podrían haber tenido un impacto más significativo, los mercados se centran en la dinámica económica de corto plazo. Será crucial observar cómo evolucionan estos factores en las próximas semanas, especialmente en lo que respecta a las decisiones futuras de la Fed y la capacidad de China para revitalizar su economía”, concluye Di Giacomo.